Cachorros reales
● Los ‘baby royals’ de Europa afrontan sus exigentes formaciones y más deberes oficiales conforme crecen
Estelle de Suecia, la hija mayor de los príncipes Victoria y Daniel, acaba de cumplir diez años. Para celebrar esta fecha tan especial la monarquía sueca ha compartido un nuevo retrato oficial de la segunda en la línea de sucesión al trono, por detrás de su madre. Estelle afronta una nueva etapa de su vida a las puertas de la preadolescencia. La Casa Real ha celebrado el cumpleaños en familia.
Pese a su corta edad, Estelle suele ser muy versátil a la hora de combinar la ropa. Sus estudios los cursa en el Campus Manilla de Estocolmo desde agosto de 2018. Aún es pronto para conocer por donde encaminará su formación.
De Suecia pasamos a Noruega. Sverre Magnus, hijo de los príncipes Haakon y MetteMarit de Noruega, de 15 años de edad, ya está inmerso en una nueva etapa escolar. El príncipe ha optado por realizar sus estudios de Bachillerato en la Escuela Superior Elvebakken, el mismo centro donde estudia su hermana Ingrid, dos años mayor que él. Ha escogido la rama de tecnologías de la información y producción de medios, dejando claras sus intenciones futuras. Desde el centro aclararon en su momento que los hijos de los príncipes no han recibido ningún trato de favor en un proceso de admisión que se antoja muy exigente.
Fruto del amor entre el príncipe Federico de Dinamarca y la princesa Mary nació Cristián, Isabel, Josefina y Vicente. En octubre de 2005 vino al mundo
Cristian. La Familia Real de Dinamarca es una de las más queridas de Europa y siempre ha mostrado una imagen de unidad. Cristián, el segundo en la línea de sucesión al trono, está matriculado en el Herlufsholm Gymnasium, un internado situado en la ciudad de Naestved, a 120 kilómetros de la residencia familiar. El exclusivo centro, cuyo coste asciende a 60.000 euros por curso más los 1.000 euros de la matrícula, somete a los estudiantes a una estricta disciplina.
Un camino similar ha sido el emprendido por la princesa Leonor y Alexia de Holanda que cursan sus estudios de Bachillerato en un internado de Gales, concretamente en el UWC Atlantic College. Leonor ha adoptado una postura discreta, manteniendo un perfil bajo desde su llegada. De su vida académica solo se conoce el horario de las clases, el menú del comedor y las actividades que realiza en el centro. No obstante, la heredera al trono no ha participado en los actos de mayor proyección pública del internado.
Un papel opuesto ha protagonizado Alexia de Holanda. La hija mediana de Máxima, que no es heredera al trono, sí ha participado de lleno en los actos del internado. Ha estado presente en la celebración de la Semana Queer dirigida a dar visibilidad a los jóvenes LGTBIQ+ y formó parte de la manifestación que organizaron los alumnos para protestar contra el cambio climático. Alexia participó de manera activa, portando una pancarta y voceando los lemas de la marcha. Su madre ha contado cómo es la vida de su hija en Gales. “De repente tuvo que lavar la ropa ella misma, cocinar y además seguir toda la educación en inglés; así que también le causó mucha tensión al principio” dijo.
Por su parte, Gabriel, hijo de Felipe y Matilde de Bélgica, abandonó el castillo de Laeken para seguir con sus estudios en Inglaterra. El segundo en la línea de sucesión al trono belga, tras su hermana Elisabeth, se mudó al National Mathematics and Science College, un centro de carácter técnico y especializado en la formación de jóvenes que aspiran a universidades punteras.