El último baile antes de la final
La vuelta en Mestalla sabe a eliminatoria, a partido único tras el 1-1 en San Mamés con un ambiente tenso tras los cruces de declaraciones en los banquillos Gayà sigue siendo duda
Valencia y Athletic Club se medirán esta noche en la vuelta de la semifinal de la Copa del Rey tras empatar a uno en la ida, que queda en nada por no tener valor doble los goles fuera de casa. Mestalla será el escenario en el que se decidirá el finalista.
El encuentro llega caldeado por el cruce de declaraciones que ha habido entre ambas entidades desde que acabó el choque en Bilbao. Hay mucho en juego, incluida una plaza de Liga Europa para el ganador de la final y el hecho de que ya se le homenajeara el pasado septiembre, hará que la afición local olvide la idolatría que siente por Marcelino tras los éxitos a los que condujo al club ser el símbolo contra Peter Lim.
El Athletic persigue su tercera final consecutiva. Encara el encuentro con la confianza que le da haber desnivelado a su favor las últimas ocho semifinales que ha disputado. Además, encadena también 15 eliminatorias consecutivas superadas en competiciones con formato copero, exceptuando finales. Finales perdió tres de las cuatros disputadas en ese tramo de tres temporadas, dos de Copa y una de Supercopa.
El Athletic quiere poner broche de oro a un torneo en el que ha eliminado a Barcelona y Real Madrid.
Para intentar rematar una Copa inolvidable, Marcelino, que tiene a toda la plantilla disponible, pondrá en Mestalla todo el arsenal que tuvo que cuidar en el Camp Nou el domingo ante la cercanía entre ambos partidos. Dio descanso a todos los jugadores que se esperan en el once inicial.
Algunos, como Óscar de Marcos, Yuri Berchiche, Alex Berenguer –está sancionado tras forzar la quinta amarilla– e Iker Muniain ni jugaron, y Yeray Álvarez, Íñigo Martínez, Dani García, Mikel Vesga, Iñaki Williams, Raúl García y Oihan Sancet no completaron el partido.
El once de Marcelino lo abrirá el joven Julen Agirrezabala, el meta elegido para situarse bajo palos en toda la Copa del Rey. La única incógnita puede estar entre la elección de Raúl García y Oihan Sancet.
Pepe Bordalás