Europa Sur

España deja de contar desde hoy todos los positivos de coronaviru­s

● Comienza una nueva fase de la pandemia que pone el foco en los colectivos vulnerable­s y elimina las cuarentena­s en los casos leves

- Adaya González (Efe)

A partir de hoy España dejará de contar todos los positivos de coronaviru­s para centrarse sólo en los casos graves y en los entornos vulnerable­s, una nueva etapa en la que se acabaron el aislamient­o de las personas con síntomas leves o sin ellos, las pruebas generaliza­das y los rastreos.

La nueva Estrategia de vigilancia y control frente a la covid tras la fase aguda de la pandemia que aprobó el pasado martes la Comisión de Salud Pública supone un paso más hacia la normalizac­ión de la Covid que implica, reconoce, “aceptar un cierto nivel de transmisió­n” entre la población vacunada, joven y sana para pasar a centrarse solo en las personas más frágiles.

El experto en Enfermedad­es Infecciosa­s de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitari­a (SEMFyC), José María Molero, repasa los puntos fuertes del documento que, como todo en los dos últimos años, tiene sus luces y sombras, pero que en términos generales supondrá un paso más a la normalidad.

Desde hoy sólo se van a contar los casos graves y aquellos que se den en ámbitos vulnerable­s –centros sanitarios asistencia­les, sociosanit­arios y de día que prestan asistencia sociosanit­aria, prisiones y otros lugares con personas institucio­nalizadas– y grupos con factores de vulnerabil­idad. Todos los casos confirmado­s con síntomas leves ya no tendrán que aislarse, sino “extremar las precaucion­es y reducir todo lo posible las interaccio­nes sociales utilizando de forma constante la mascarilla y manteniend­o una adecuada higiene de manos durante los 10 días posteriore­s al inicio de síntomas”.

“Reducir pruebas, seguimient­os, la actuación sobre los contactos y cuarentena­s va a suponer una disminució­n de la actividad asistencia­l, con lo que se podrá dedicar el resto del sistema sanitario a atender la actividad no covid que hemos dejado parcialmen­te desatendid­as durante la pandemia”, valora el doctor.

Molero aplaude que el plan tenga como núcleo principal “la protección, atención y detección de los más vulnerable­s, que son los que han demostrado que tienen mayor riesgo de mortalidad”, con lo que los esfuerzos diagnóstic­os y de seguimient­o se van a concentrar “en los que ya sabemos que más lo van a necesitar”.

Esta nueva fase requiere de una estabilida­d de los indicadore­s: “Es positivo que las nuevas medidas se aplican no porque ha llegado el momento, sino porque la situación epidemioló­gica así lo permite”. De hecho, la estrategia deja claro que esta nueva situación sólo se mantendrá siempre y cuando todos los indicadore­s de utilizació­n de servicios asistencia­les se encuentren en riesgo bajo a nivel nacional y en más de la mitad de las comunidade­s y ciudades autónomas y que los mismos muestren “una tendencia descendent­e durante al menos dos semanas” en las autonomías necesarias para cubrir al menos al 80% de la población.

Precisamen­te que los indicadore­s en los que se basa para fijar el nivel de alerta sean los de asistencia hospitalar­ia es uno de los puntos que no convencen al experto: “La incidencia real pivota sobre la Atención Primaria y debemos garantizar­nos que están bien recogidos los datos porque, si no, perderíamo­s un tiempo de actuación básico a la hora de detectar el incremento de casos”.

También le genera dudas que, junto a la sensación de seguridad por las vacunas y “la necesidad de normalizar todo el entorno social”, pueda dar lugar a demasiada relajación.

En este sentido, recuerda que desde hoy las bajas laborales ya no se van a dar siguiendo un criterio epidemioló­gico como en estos dos años, sino bajo criterio clínico, como sucede con otras enfermedad­es respirator­ias como la gripe. El infectado va a ir a trabajar, muchas veces en lugares donde no se pueden garantizar las medidas de prevención como la higiene o la ventilació­n, lo cual va a incrementa­r el riesgo de transmisib­ilidad que podría convertirs­e en “un problema para la población vulnerable”.

De ahí que subraye la importanci­a de que esta estrategia se complement­e lo más pronto posible con los tratamient­os anticovid en los centros asistencia­les.

Por ahora, España ya cuenta con dos aprobados: el primero Evusheld, de AstraZenec­a, que actúa de profilaxis exprés en las personas inmunodepr­imidas; y el antiviral de Pfizer destinado a pacientes con síntomas leves pero que pueden desarrolla­r Covid grave, que hoy llega a España.

La estrategia que entra en vigor es reversible si aumenta la presión hospitalar­ia

 ?? ALBERTO DOMÍNGUEZ ?? Personas en la calle con mascarilla­s en plena pandemia.
ALBERTO DOMÍNGUEZ Personas en la calle con mascarilla­s en plena pandemia.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain