La Audiencia enjuiciará las ayudas al “chófer de la coca” en septiembre
● La Fiscalía reclama una condena de 14 años de prisión para el conductor por las ayudas recibidas de 1,4 millones de euros
Ya hay fecha para el que puede ser el verdadero juicio de los ERE, con permiso del “procedimiento específico” en el que fueron condenados 19 ex altos cargos de la Junta, entre ellos los ex presidentes de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán. La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla ha fijado para septiembre de este año el juicio por las ayudas que el fallecido director de Trabajo Javier Guerrero concedió al que fuera su chófer Juan Francisco Trujillo por importe de 1.475.028,01 euros y que, en parte, se emplearon para la compra de regalos y cocaína.
El juicio se ha fijado con un considerable retraso, dado que la vista oral comenzará casi cinco años después de que el juzgado enviase el sumario a la Audiencia para su enjuiciamiento, en noviembre de 2017. Ahora, la Audiencia ha fijado el juicio para septiembre, en concreto se han programado siete sesiones que se celebrarán los días 5, 9, 14, 15, 16, 23 y 30 del mes.
El sumario consta de siete tomos, así como 3.009 folios y 10 piezas de responsabilidad civil de los encausados. La juez impuso una fianza de 2,1 millones al chófer de Guerrero. En esta causa hay tres acusados, dado que además de Trujillo, están procesados el directivo de Vitalia Antonio Albarracín Muñoz – al que se impuso una fianza de 158.000 euros– e Isidoro Ruiz Espigares, socio de una de las empresas del chófer y cuya fianza asciende a 585.000 euros, mientras que la esposa del conductor de Guerrero, Juana Gallego, debe hacer frente a una fianza de 77.000 euros como beneficiaria “a título lucrativo” de las ayudas que recibió su marido.
La Fiscalía Anticorrupción reclama para el chófer una condena de 14 años de prisión y 30 años de inhabilitación por delitos continuados de falsedad, prevaricación y malversación de caudales públicos, mientras que solicita una condena de seis años de prisión y diez de inhabilitación para el ex directivo de Vitalia Antonio Albarracín Muñoz, y seis años y tres meses de prisión y 17 años de inhabilitación para Isidoro Ruz Espigares, socio de una de las empresas del chófer.
El Ministerio Público reclama asimismo que Trujillo indemnice a la Junta con 900.000 euros; mientras que Trujillo e Isidoro Ruz deberán abonar otros 450.000 euros de otra ayuda. Por último, los acusados Trujillo y el ex directivo de Vitalia Antonio Albarracín deberán abonar otros 125.028,01 euros de la póliza que suscribieron a nombre de la madre del chófer. El fiscal pidió además que la esposa de Trujillo, Juana Gallego, responda de la cantidad de 24.000 euros como responsable “a título lucrativo” de parte de las ayudas.
En su escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía Anticorrupción relata que el ex director de trabajo y su chófer “idearon inicialmente la constitución de sociedades mercantiles para poder disponer para ellos de parte de los fondos públicos que tenía a su disposición la Dirección General de Trabajo con cargo a la partida 31L”, conocida como el fondo de reptiles, y esas sociedades –Lógica Estratégica Empresarial e Iniciativas Turísticas Sierra Morena– recibieron cantidades “para financiar falsos proyectos de inversión”.
Después, puestos de común acuerdo y “con ánimo de ilícito enriquecimiento” con un tercer investigado –Isidoro Ruz– decidieron que este presentara como promotor ante la Dirección General de Trabajo “un proyecto, sin fecha, para el emplazamiento de una granja avícola en el cual, como financiación de la inversión, se disponía de una subvención de 450.000 euros”. En la tramitación del pago de estas cantidades como ayudas o subvenciones a estas tres sociedades, “se ha prescindido total y absolutamente del procedimiento legal establecido”.
El importe de 450.000 euros fue “fijado a propósito” por el director de Trabajo para “evitar” que el Consejo Rector del IFA las aprobase, añade el Ministerio Público, que relata cómo Guerrero recibió “entregas en efectivo, antigüedades,
Se han concretado siete sesiones que tendrán lugar los días 5, 9, 14, 15, 16, 23 y 30 del mes
un equipo de navegación para su vehículo oficial, invitaciones a restaurantes y locales de copas y entregas de cocaína” por parte de su chófer con los fondos transferidos de la agencia pública Idea.
Así, Anticorrupción destaca que el destino que los acusados dieron a los fondos “supuso no sólo una merma importante en la disponibilidad presupuestaria para atender la finalidad del programa 31L, sino también un grave perjuicio a la actividad a desarrollar por la Administración de la Junta.
La juez María Núñez Bolaños dictó en marzo de 2017 el auto de procesamiento, en la que señaló que de forma indiciaria puede afirmarse que el director general Javier Guerrero, otorgó “de forma arbitraria y con ánimo de lucrarse él mismo y Juan Francisco Trujillo, persona vinculada laboralmente a Guerrero en su condición de conductor de éste, cuatro ayudas”.