Europa Sur

Orban rentabiliz­a su relación con Moscú antes de las urnas

- A. Sánchez Solís (Efe)

La invasión de Ucrania ha impactado en la campaña electoral en Hungría, un país que en el pasado también fue víctima de agresiones rusas, pero cuyo Gobierno actual lleva una década transmitie­ndo la idea de una Rusia aliada en su lucha por la identidad cristiana frente a los valores “ajenos” de la UE.

Desde que comenzó el ataque ruso, los sondeos muestran una leve mejora de la intención de voto en las elecciones del próximo domingo para el primer ministro, el ultranacio­nalista Viktor Orban, y de su partido Fidesz, paralela a una caída de la candidatur­a unida de toda la oposición. La diferencia entre ambos ha pasado de cuatro a seis puntos, un desvío pequeño pero que puede acabar desequilib­rando el empate técnico en el que han estado durante meses.

Esta evolución se explica en parte con el tradiciona­l rechazo a cambios políticos que los electores muestran en tiempos de crisis e incertidum­bre, pero también en la compleja actitud de parte de la sociedad húngara hacia Rusia y cómo Orban y la oposición han reconducid­o sus mensajes electorale­s. Orban, considerad­o como el mejor aliado de Rusia en la UE, no sólo fue el último líder comunitari­o en condenar la “acción militar” rusa, sino que la agencia estatal de noticias MTI tardó días en referirse al ataque como una “invasión”. Desde entonces, no sólo se ha opuesto a sancionar o interrumpi­r la compra del gas ruso, sino también a enviar armas a Ucrania.

Orban apuesta por una postura de neutralida­d que contrasta con el hecho de que Hungría es miembro de la UE y de la OTAN. Esa supuesta neutralida­d ha llevado a Volodimir Zelenski, líder de Ucrania, a reclamar a Orban que decida “con quién está” en el conf licto.

La postura frente a Rusia provocó además una insólita crisis en el llamado Grupo de Visegrádo

(V4), formado por Polonia, República Checa, Eslovaquia y Hungría. Tanto Polonia como Chequia se han negado por ello a participar en una cumbre de ministros de Defensa del V4 prevista para hoy y mañana en Budapest, que al final fue cancelada. La postura de Orban responde, sin embargo, a la opinión de una mayoría de húngaros. Las encuestas muestran que el 72% de los ciudadanos son partidario­s de mantener esa equidistan­cia.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain