Mata a cuchilladas a su ex mujer y hiere de gravedad al novio de ella
● La asesinada de Cuenca, de 46 años, es la novena víctima por violencia machista en este 2022
Una mujer de 46 años fue asesinada la madrugada de ayer en la pedanía conquense de Nohales por su ex pareja, un hombre de 43 con una orden de alejamiento desde finales de 2021 y con quien tenía dos hijos, de 14 y 8 años; con este crimen ya son nueve las mujeres muertas por la violencia machista en lo que va de año. El asesinato de Victoria Cristina ocurrió un día después de que se produjera otro crimen en Sueca (Valencia), donde un hombre mató a su hijo de 11 años, en lo que constituye el primer caso de violencia vicaria de 2022.
La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género confirmó que el de Nohales se trata de un nuevo caso de violencia machista, con lo que ya son 1.135 mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas desde 2003, año desde el que existen estadísticas fiables en esta materia. La mujer tenía dos hijos con el presunto agresor y según las estadísticas de la Delegación, son nueve los menores huérfanos por esta lacra en lo que va de año, 345 desde 2013.
Este crimen ocurrió sobre las 0:40 de ayer, cuando la Guardia Civil recibió una llamada, al parecer de la hermana del agresor, alertando de que su hermano había ido a Nohales supuestamente para agredir a su ex pareja, según. Cuando los agentes han llegado vieron que, en la entrada de la vivienda, un hombre perseguía a otro, y al entrar encontraron a una mujer muerta con heridas por arma blanca, según la Guardia Civil.
En cuanto a los dos hombres que estaban en el lugar, uno es la actual pareja de la mujer asesinada, un hombre de 40 años que también presentaba heridas por arma blanca y estaba grave, y el otro es la ex pareja y presunto asesino que ante la llegada de los agentes para detenerlo se autolesionó con el cuchillo que llevaba.
Este hombre tenía una orden de alejamiento de la mujer desde finales de 2021 y ambos tenían dos hijos menores en común, de 14 y 8 años. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Cuenca decretó secreto de sumario en este caso de violencia machista y el detenido fue intervenido en el hospital de Cuenca y está en la UCI, según fuentes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha.
Tras la confirmación del nuevo crimen machista, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, escribió en Twitter que hay que seguir redoblando esfuerzos para garantizar la vida de todas las mujeres. “Mi cariño para sus hijos y seres queridos”, indicó.
Al tiempo, Sánchez manifestó el “gran dolor” por el asesinato del menor de Sueca. “La violencia estructural contra las mujeres se ejerce de muchas formas, la violencia vicaria es la más terrible”, subrayó Sánchez, quien insistió en que hay que llegar a tiempo para evitar estos crímenes.
De hecho, este crimen a manos de su padre evidenció una laguna de comunicación entre juzgados del mismo municipio, que no tuvieron en cuenta una sentencia previa por maltrato a la hora de ratificar un convenio de divorcio en el que se estableció la custodia compartida. El asesinato se conoció el domingo cuando la madre del menor acudió al domicilio paterno a recoger a su hijo y, al no abrirle la puerta, avisó a los servicios de Emergencias, que confirmaron la muerte de Jordi, que había cumplido 11 años el día anterior y se encontraba con su padre a pesar de que éste tenía una orden de alejamiento respecto de la madre, que era la responsable de la custodia en virtud de la sentencia penal por maltrato.
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana informó ayer de que los cónyuges ratificaron el convenio regulador de custodia compartida sin informar al juzgado de que existía un procedimiento penal por malos tratos. Ese convenio fue establecido en julio de 2021, cuando ambos cónyuges presentaron una demanda de divorcio de mutuo acuerdo, y fue ratificado también por ambos en septiembre de ese mismo año.
Marta Tur, prima de la madre del niño asesinado y portavoz de la familia materna, aseguró ayer que no había precedentes de malos tratos al menor por parte del padre y que por eso decidían llevarlo unas horas cada domingo, para que lo viese. En el proceso de divorcio, el padre del único hijo de la pareja “había mostrado cierta obsesión, la acosaba, pero con el niño nunca, al menos no nos consta –aseveró Tur–, y no es cierto que hubiese amenazado antes con matarlo, en ese caso no habríamos accedido nunca a llevárselo”.
La familia del niño asesinado en Valencia afirma que no había precedente de maltrato