Leclerc pisa fuerte
El monegasco marca el ritmo en la primera jornada de los entrenamientos libres en el circuito de Albert Park
El monegasco Charles Leclerc (Ferrari), líder del Mundial de Fórmula Uno, marcó el mejor tiempo ayer en la primera jornada de entrenamientos libres para el Gran Premio de Australia, el tercero del año, que se disputa en el circuito semiurbano de Albert Park de Melbourne, donde los españoles Carlos Sainz y Fernando Alonso marcaron el tercer y el cuarto tiempo, respectivamente; y el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), el quinto.
Leclerc, de 24 años, ganador en Bahréin y segundo en Arabia, que lidera el primer Mundial de la nueva era de la F1 con 45 puntos, doce más que Sainz –de 27–, firmó la vuelta rápida de los ensayos en la segunda sesión, en la que se marcaron los mejores tiempos.
La normalidad parece volver poco a poco a la categoría reina, en la que, a las primeras de cambio y en espera de evoluciones y desarrollos, se vislumbra que Ferrari, la escudería más laureada de la historia –y con ella, Sainz– puede soñar con volver a saborear los éxitos de antaño. Al tiempo que Mercedes, la gran dominadora de los pasados ocho años –en los que festejó seis de los siete títulos de sir Lewis, que ganó el primero en 2008, con McLaren–, parece que aún no ha dado con la tecla. George Russell, ex Williams y nuevo compañero de su compatriota Hamilton, tampoco se inscribió entre los primeros diez en la tabla de tiempos, al acabar la jornada con el undécimo crono. Y si el excéntrico y espectacular campeón de Stevenage acabó el día a segundo y medio de Leclerc, el prometedor Russell lo hizo a un segundo y 234 milésimas.
Sainz, segundo en el Mundial después de haber sido segundo en Bahréin y tercero en Arabia, dos pruebas de las que se marchó medio enfadado, porque aspira claramente a más, había sido el mejor en el primer libre, en el que paró el crono en 1:19.806, con 571 milésimas de ventaja sobre Leclerc y 593 respecto a Checo, que hace dos sábados firmó la primera pole de la historia para México en Yeda, donde acabaría cuarto.
El alemán Sebastian Vettel (Aston Martin), que se había perdido las dos primeras carreras del año a causa de sendos positivos por Covid-19, regresó al campeonato que se adjudicó en cuatro ocasiones. Pero lo hizo sin demasiada suerte, ya que no pudo rodar en el segundo ensayo, después de romper motor en el primero, en un percance que provocó una de las dos banderas rojas de la sesión matinal. La otra la motivó la retirada de pista de una de las piezas que se soltó del coche del mexicano Pérez. Checo firmó el quinto tiempo en una jornada en la que en Australia se habló español y en la que Alonso acabó la jornada justo por detrás de Sainz.
En su mejor vuelta, Fernando paró el cronómetro en 1:19.537, a 559 milésimas de Leclerc, en el segundo entrenamiento, que se paró unos instantes, con otra bandera roja, para retirar de la pista una pieza que se había desprendido de la parte delantera del Aston Martin del canadiense Lance Stroll. A cuatro décimas del monegasco y, un puesto por delate del genial piloto asturiano, se quedó Sainz. El tercer y último entrenamiento libre se disputará hoy, horas antes de la calificación, que –a partir de las ocho de la mañana, en horario peninsular español– ordenará la parrilla de salida de la carrera dominical prevista a 58 vueltas, para completar un recorrido de 307 kilómetros y medio.
Fernando Alonso