El Barça se sienta en el trono europeo
El equipo catalán consigue su cuarto entorchado continental ante el campeón de la pasada edición
que necesitó una remontada heroica y un prórroga para ganar a 18 segundos para la conclusión del tiempo extra.
En una actuación muy fiable en la parcela defensiva, el cuadro español impuso su pegada para marcharse 2-0 al descanso con goles de Lozano y Pito, y Ferrao logró el tanto de la tranquilidad a los 27 segundos de la segunda parte antes de que Dídac Plana firmara la sentencia en los compases finales.
Los árbitros anularon un gol tempranero al Sporting porque el balón había salido por la línea de banda. Superado este sobresalto, el Barça se mostró en todo momento más sólido, limitó las pérdidas de balón y redujo la amenaza del Sporting.
En un encuentro muy igualado y de pocas ocasiones, los locales dieron los primeros avisos en remates de Adolfo y Lozano. La agresividad del portero Guitta en el uno contra uno privó del gol a Matheus y Marcenio.
El cuadro lisboeta probó suerte en un chut desviado de Tomás Paço, Dyego abortó desde el suelo una doble ocasión de Esteban y
Cavinato y Dídac Plana se mostró muy seguro bajo palos ante los remates de Zicky y Esteban.
El Barça estaba más cerca del gol. Matheus se topó con el palo a los 16 minutos y, acto seguido, Lozano inauguró el marcador al superar a Guitta. Los barcelonistas no levantaron el pie del acelerador hasta ampliar distancias por mediación de Pito con el 2-0 al descanso, lo que suponía una sólida ventaja.
El cuadro catalán regresó al parqué como un rodillo y firmó el 3-0 en un servicio en largo de Ortiz que Ferrao ajustó a la escuadra con una rápida maniobra. El Barça no se sintió acorralado en ningún momento pero Guitta evitó la goleada con intervenciones de mérito.
El Sporting sacó en los compases finales al portero-jugador y Dídac Plana firmó la sentencia con un gol de campo a campo.
Así, el Barça conquistó la cuarta Liga de Campeones de su historia en el que supone el tercer título en la primera temporada de Jesús Velasco en el banquillo, después de ganar la Supercopa y la Copa de España.