DOS MUJERES QUE HAN DADO LA TALLA
MARGARITA Robles y Paz Esteban han demostrado que tienen los ovarios bien puestos. Que saben defender su trabajo, sus principios, que son capaces de enfrentarse a quien sea aunque se trate de compañeros de Gobierno, amigos, o sus propios jefes. Que no se arredran ante las dificultades, las amenazas ni los chantajes, que dan la cara a pesar de que algunos, de su propio bando, lo que buscan es partírsela. Que dimitan de su trabajo o que sean cesadas. No se han achantado, sino que, al contrario, han encontrado fuerza cuando los ataques arreciaban y no han bajado la cabeza, no han cedido ni un milimetro en sus posiciones.
Imposible saber qué les aguarda en el futuro. Su jefe máximo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es de los que sí ceden ante las exigencias y amenazas del adversario, que además se da la paradoja de que es adversario socio. O adversarios socios. Saben perfectamente la ministra de Defensa y la directora del CNI que Sánchez las puede dejar caer en cualquier momento, pero no sólo no sale ni saldrá de sus bocas un frase crítica sino que aguantan el tipo todo lo que pueden y más.
Ni una queja a pesar de que los que más tendrían que respaldarlas, no lo hacen. Curiosamente, donde encuentran más apoyo público es en los partidos de la oposición que hacen bandera, como ellas, de la defensa de España, y de la Constitución. A Robles y Esteban las apoyan aquellos que defienden con uñas y dientes los llamados asuntos de Estado. Que son precisamente los asuntos a los que dan la espalda los socios de Gobierno, que además, para mayor escarnio, utilizan el parlamento para promover leyes que tienen poco que ver con el bienestar ciudadano, y mucho con asuntos menores que sin embargo potencian a los sectores que son su principal caladero de votos,
Robles y Esteban son hoy dos ejemplos de mujeres con una carrera profesional detrás que han ejercido con rigor y solvencia, dos mujeres que no presumen del modelo actual del feminismo que se pretende imponer desde este Gobierno, sino el feminismo de siempre, el válido, el que ha luchado por la igualdad de las mujeres sin que conlleve el considerar al hombre el enemigo. Robles y Esteban son ejemplo de mujeres que se toman su oficio, y el ejercicio de la política, como un privilegio. Porque desde sus cargos, de máxima responsabilidad, pueden demostrar que saben asumir cualquier desafío y, por encima de todo, desde esos cargos tienen capacidad máxima para defender a los españoles y a sus instituciones. Aunque eso las coloca en la diana de personajes de mediocre biografia, en algunos casos tenebrosa biografía.
Gracias.
Robles y Esteban son hoy dos ejemplos de mujeres con una carrera profesional detrás que han ejercido con rigor y solvencia