Días de guerra: 28 de julio de 1914
Algeciras vuelve a ser protagonista a nivel nacional por la llegada de heridos y el embarque de nuevas tropas ante un grave resurgimiento del conflicto en el Rif
gestor del moderno servicio, fue uno de los artífices de que, pocos años después, se hiciera público: “Finaliza la instalación de aparatos y dependencias que se han efectuado en la casa de la calle Regino Martínez, esquina El Calvario para establecer en ella la Central de Telégrafos de Algeciras”.
Sea como fuere, nuestra ciudad, en aquel soleado y desolado día de julio del 14 en el que Europa comenzó una pesadilla que duraría cuatro interminables años, de seguro no dejó de preguntarse: ¿Entrará España en el conf licto? Hasta aquel momento de general consternación, nuestra ciudad había amanecido mirando con esperanzas al futuro, según los datos aportados por las autoridades del incipiente puerto: “Buques entrados: 66 de carga. 19 de vapor, 27 buques de vela, 46 de vela. Toneladas 32.802. Buques salidos 4. 30 buques vapor con cargas, 24 id. Vela con carga, 26 id. Buque de vapor en lastres”. Magnífica estadística que reafirmaron las recientes obras e instalaciones realizadas en un lugar que, no mucho tiempo atrás, era nombrado técnicamente como fondeadero.
De regreso al sombrío presente y a partir de aquellos instantes de incertidumbre, los algecireños volverían a traer a sus mentes los ingratos recuerdos de la marcha de sus hijos a los pasados -pero nunca olvidados por el dolor generadoconflictos de Cuba y Marruecos. Y así se volvió a mirar a la iglesia de la Palma, a la capilla de Europa o a la de la Caridad; a sus altares, a sus vírgenes y a sus santos. Por aquellos días la asociación de fieles de la parroquia denominada Adoración Nocturna, celebraría: “Vigilia general y extraordinaria [...] El Santo sacrificio de la misa tendrá lugar a las 6 de la mañana [...] También pueden asistir los fieles a primeras horas de la noche. Ejercicios Piadosos: Los del apostolado de la oración, se celebrarán los viernes con misa de Comunión General a las 8’30 de la mañana y después del toque de oraciones, el rezo con S. D. M. de manifiesto”.
Durante aquellas jornadas de declaraciones de guerra entre las naciones, una buena noticia local se hace pública: “Una vez finalizadas las obras, se bendecirá la nueva escuela católica que se ha de establecer en la Villa Vieja; para atender así á la instrucción que tan necesaria es á la niñez de aquel populoso barrio. Cuantos quieran inscribirse en ella deben acudir al Sr. Cura Párroco -de la Palma- que facilitará gratis la nota de la partida de bautismo. También pueden solicitar el ingreso a la Señorita Presidenta de las Escuelas Católicas”. Y así, mientras se pone en marcha la que sería conocida como Escuela de los Cuatro Vientos, situada entre las futuras calles Eladio Infante y Rayos X, nuestra ciudad convulsa ante la expectativa de otro conf licto bélico, y sus consecuencias para las familias “sin posibles”, como ya se vio en el reciente pasado, se seguiría preguntando ¿serán otra vez llamados a filas los reservistas como hizo el Gobierno en el 9?
A partir de aquellos primeros instantes de zozobra, los cinco sentidos de los algecireños se abrieron para empaparse de las primeras noticias que llegaban del conflicto, según se iban produciendo los primeros incidentes entre las naciones enfrentadas. Y ya fuera a través del telégrafo, ya fuera a través de otros medios oficia