“El desarrollo de la IA en la ganadería es más lento”
● La empresa facilita una herramienta de ganadería de precisión mediante fitoterapia ● “Las explotaciones lecheras pueden llegar a obtener una mejora en su rentabilidad de hasta un 30%”
BOALVET es la primera compañía que utiliza una herramienta para ganadería de precisión mediante Inteligencia Artificial que utiliza la fitoterapia, facilitado a las explotaciones importantes aumentos de rentabilidad.
–¿Lleva la ganadería retraso en la incorporación de las nuevas tecnologías respecto a la agricultura?
–La Inteligencia Artificial y el aprendizaje automático facilitan la vida cotidiana y se usan en muchos sectores empresariales y domésticos. En la agricultura se lleva utilizando la Inteligencia Artificial desde la década de los 90 con la incorporación de GPS en tractores semi-autónomos. La recogida de datos, el análisis de los mismos y la toma de decisiones a tiempo real se aplican en muchas tareas agrícolas en la actualidad, como son la identificación temprana de enfermedades y evaluación de daños, el control de malezas, etc. Sin embargo, en el sector ganadero el desarrollo de la Inteligencia Artificial está siendo más lento. En la actualidad hay varias startups españolas que están implementando la AI a varios sectores ganaderos como el porcino o el avícola. Nosotros somos pioneros en Andalucía, y en España, en el sector de ganadería lechera.
–¿En qué consiste la solución Precisión Animal Milking (PAM)?
–PAM Precisión Animal Milking es una herramienta de monitorización de granjas lecheras mediante Inteligencia Artificial cuyo objetivo es la toma automática de decisiones para mejorar la sanidad animal, al tiempo que optimiza la calidad y la cantidad de la leche producida, reduciendo los costes y mejorando la rentabilidad de las granjas lecheras. Esta solución digital aumenta la rentabilidad hasta un 30% en las ganaderías lecheras gracias a la automatización de la toma de decisiones correctas, el análisis de datos de productividad en tiempo real y aplicando extractos de plantas oficinales bajo el criterio de atención temprana. Se trata de la primera herramienta de ganadería de precisión mediante Inteligencia Artificial que utiliza la fitoterapia, evaluada su uso mediante el uso de indicadores técnico-económicos. Al establecer la Fitoterapia como base de la sanidad animal de las ganaderías, se reduce la utilización de fármacos de síntesis y por tanto su impacto negativo sobre los alimentos de consumo humano y el medio ambiente.
–¿Para su uso es necesario que la cabaña ganadera tenga algunas características específicas en cuanto a tamaño u otras magnitudes?
–En la actualidad PAM se está utilizando en granjas lecheras de ovino y caprino. Si bien la herramienta PAM se centra en la gestión sanitaria de la producción de leche de rumiantes, el sistema está diseñado para ser lo suficientemente adaptable como para soportar otras especies animales o tipología de sistemas agropecuarios (intensivos, extensivos…) con bajo o nulo grado de digitalización. Los resultados esperados son siempre mayores cuanto más alto es el grado de digitalización.
–¿Qué beneficio supone el uso de estas soluciones respecto al manejo tradicional?
–Con la implantación de PAM en las ganaderías lecheras conseguimos desarrollar un modelo productivo 6.0: la tecnología asistirá a los ganaderos en la gestión de sus granjas de una manera simple y efectiva. Podrán recibir de forma automática en su teléfono móvil las instrucciones o recomendaciones a través de una notificación, simplificando la toma de decisiones y la gestión de la información, que se vuelve autónoma e inteligente, mejorando su calidad de vida a la vez que incrementando la rentabilidad y sostenibilidad de la granja.
–Creo que además de procurar aumentar la productividad de las explotaciones el sistema PAM también cuida la salud de los animales. ¿Es así?
–PAM combina la Inteligencia Artificial con la aplicación de fitoterapia veterinaria en las granjas lecheras. El uso de fitoterapia de manera preventiva y curativa en los animales cumple diferentes objetivos; entre ellos, la mejora del estatus sanitario de los animales desde el punto de vista del bienestar animal. PAM investiga y recomienda fitoterapia mediante detección en línea para tratar manera temprana antes de la deriva en enfermedades, estrés animal y caída de la producción.
–¿Son partidarios los ganaderos andaluces de introducir estas técnicas?
–Los ganaderos andaluces que apuestan por la mejora continua de sus granjas son receptivos hacia el uso de las nuevas tecnologías y las alternativas terapéuticas, están deseando comprobar en primera persona los resultados de su aplicación. Es imprescindible acercar la digitalización a las personas en su día a día mediante modelos adaptativos, sencillos y directos, que eviten la costosa interpretación de resultados.
–¿Resulta muy caro aplicar nuevas tecnologías como ésta?
–No, no es costoso porque la rentabilidad de la ganadería es capaz de incrementarse hasta en un 30%. Si bien, a veces puede resultar laborioso que el sector avance en reconocer que esta tecnología es capaz de agilizarle el trabajo y mejorar su calidad de vida; en la actualidad este desconocimiento puede hacer que este desembolso lo vean como una coste en lugar de cómo una inversión.
–¿Cómo resulta la colaboración entre la empresa, la Universidad de Sevilla y el CSIC?
–En la actualidad me encuentro doctorando bajo la tutela de la doctora Yolanda Mena Guerrero, profesora e investigadora del Área de Producción Animal de la Universidad de Sevilla que cuenta con la codirección del investigador científico David Yáñez del CSIC, la tesis Inf luencia del uso de extractos de plantas en la sanidad y nutrición, y su relación con la sostenibilidad de la producción animal, por lo que la comunicación entre las tres partes es muy fluida y productiva. En este sentido, mi agradecimiento por su apoyo riguroso es inestimable. –¿Cuánto tiempo le ha llevado el desarrollo de esta tecnología?
–Fue en 2018 cuando iniciamos el proyecto de creación de PAM junto a Substrate AI, empresa especialista en inteligencia artificial para la rentabilidad de los negocios. El proyecto ha sido financiado por el ICEX como el mejor puntuado en la candidatura 2020.
–¿Sería posible sin la colaboración de las instituciones?
–El apoyo financiero del ICEX ha sido un gran estímulo para poder desarrollar el proyecto en un momento tan necesario como éste, donde la reducción del uso de antimicrobianos es crucial para controlar la aparición de superbacterias resistentes a antibióticos de síntesis. La colaboración público-privada con empresas como Greenvet o Piensos Ecolucat Montoya ha permitido acelerar la obtención de resultados.
–¿En qué otros proyectos está trabajando Boalvet a medio plazo?
–Por un lado trabajamos con empresas de todo el mundo construyendo la granja del mañana, desarrollando proyectos de I+D+I para empresas en el área de la alimentación, la fitoterapia, la agronomía y la calidad alimentaria. Y, por otro lado, estamos trabajando en la vertiente de formación, apostamos por el aprendizaje de todos los implicados en la cadena de valor para generar un verdadero cambio en la industria láctea. A finales de año lanzaremos nuestra Formación Internacional dirigía a profesionales y técnicos vinculados con el sector lácteo (veterinarios, zootecnistas, biólogos, y gestores de granjas…) con el objetivo de crear especialistas en “IA Ganadería Verde de Precisión” (AI Precision Green Livestock) dotándolos con las herramientas necesarias para la “Granja del Mañana”.
PAM se está usando en las ganaderías lecheras de ovino y caprino, pero es adaptable”
Conseguimos desarrollar un modelo productivo 6.0, con una gestión simple y efectiva”