Cerca de 50.000 andaluces faltan a su trabajo cada día sin causa justificada
● Un informe de Randstad revela que el absentismo repuntó entre octubre y diciembre de 2021 por la variante ómicron
181.989 andaluces faltan de media a su trabajo a diario, y de ellos 136.492 lo hacen con baja médica y 45.497 sin causa justificada, según el informe sobre absentismo laboral de la firma de recursos humanos Randstad, correspondiente al cuarto trimestre de 2021.
A nivel nacional, cerca de 1,2 millones de personas no acuden a su puesto de trabajo. Exactamente, 1.186.875 profesionales, de los cuales el 25% (297.053) lo hicieron pese a no estar de baja, mientras que el 75% (889.822) se ausentaron por una incapacidad temporal. “Estos datos suponen un ligero empeoramiento y un cambio en la tendencia a la baja observada desde principios de año”, afirma Randstad. En concreto, y con respecto a las cifras del anterior trimestre, el absentismo total aumentó un 7,7%, en el caso de bajas médicas un 5,8% y un 14,1% en el caso de las injustificadas. La razón puede estar en el repunte de contagios por ómicron.
El absentismo laboral supone que en nuestro país se pierden el 5,9% del total de las horas pactadas, cuatro décimas más que en el trimestre anterior. El absentismo no debido a incapacidades temporales, es decir, el no justificado, tuvo una tasa del 1,5%.
“El aumento del absentismo injustificado durante los últimos tres meses del año es un mal dato, ya que puede lastrar la recuperación económica al no tener las empresas recursos. Se hace necesario indagar las causas, por si determinadas medidas de conciliación o de motivación pueden paliar el absentismo”, asegura Valentín Bote, director de Randstad Research.
Por sectores, la industria es la que registra un mayor absentismo, con un 6,1%, cerca del sector servicios, con un porcentaje del 6%. El sector de la construcción es donde menos, un 4,5%. Los mayores porcentajes de absentismo tuvieron lugar en las actividades de juegos de azar y apuestas (9,9%) y en actividades sanitarias (9,4%). Las menores tasas fueron en actividades inmobiliarias, actividades de las sedes centrales y actividades de consultoría de gestión empresarial (ambas con el 3,7%).