DIFERENTES Y ESPECIALES, ¿Y CÓMO?
● Pilar Manchón nos ilusionó con un discurso –memorable-- en el X Premio Clavero; rompedora y esperanzadora ella
al hablar de su tierra, Andalucía, en esa clave: “Tenemos que aprovechar lo que nos hace diferentes y especiales”. Es simple; puede hasta parecer cándido. Pero si permiten otro apunte la frase apela a un axioma: si para competir no te basas en tus recursos y tus capacidades, lo tienes crudo. De donde no hay, no se puede sacar. Si no se dan las circunstancias o no se interviene sobre ellas con propósito, las potencias se evaporarán sin acabar siendo hechos. Recordarán: “Andalucía va a ser la California de Europa”. Pero de la palabrería política al hecho va un gran trecho.
La filóloga convertida en una ejecutiva –habrá muchos– del desarrollo corporativo de Google lanza una idea, la de buscar palanca en las esencias de una tierra, Andalucía, para convertir unas supuestas capacidades congénitas en beneficios para una región que a duras penas converge en renta con su entorno, la Unión Europea, ostentando unos niveles de desempleo vergonzantes y una dependencia casi de monocultivo
La gran sangría económica de nuestra tierra es la del talento emigrante, si no vuelve
del turismo, esa ancla de poco valor añadido. ¿Cómo vamos a lograr que nuestras supuestas capacidades distintivas transformen a nuestra tierra en un manantial de desarrollo que nos emancipe del bajo valor de la hostelería y la hotelería, cada vez más rentabilizado por fondos ajenos al territorio? No cabe pedirle a Pilar Manchón –esa crack incontestable– que nos resuelva tan complicada ecuación. Ella trabaja para el centro del mundo. Su patria chica es periférica, y ya le queda más que lejos. Es el gran reto de las autoridades políticas del Sur conseguir que nuestros talentos reviertan su formación y su capacidad aquí. Muchas cualidades naturales y de promesa de estabilidad nos adornan. Mas, del dicho al hecho, va un gran trecho. Sin nada que objetar a la propuesta de la valiosa mujer que encantó al recoger este premio rompedor y que nos conmueve, debemos ser conscientes de que nuestros talentos mejores están a tiro de AVE o de vuelo transoceánico al centro del mundo económico vigente, como es el caso.