La luz para clientes ligados al mercado mayorista vuelve a subir
que entrar unidades de gas a funcionar que no hubieran sido activadas si no fuera para atender esa demanda, y eso lo que hace es elevar el coste, ya que las centrales de gas son compensadas en España y Portugal por la diferencia entre el precio del gas en el Mercado Ibérico del Gas y el precio tope que se le ha puesto para el mercado eléctrico. González dijo que ya desde el 15 de junio, en que entró en vigor el mecanismo, han desaparecido totalmente las importaciones de electricidad desde Francia y vaticinó que eso va a seguir sucediendo, pues desde el 15 de junio todas las horas de casación del precio de la electricidad en el mercado mayorista son más baratas en el mercado ibérico.
Por otro lado, aseveró que el mecanismo se ha empezado a aplicar en una semana atípica, en medio de una ola de calor con récords de demanda y también con los ciclos combinados de gas alcanzando máximos de producción desde 2008, por lo cual ni se han producido los ahorros previstos ni los precios que se preveían de media.
Preguntado por los descensos que preveía el Gobierno antes de la aplicación del mecanismo, de entre el 15% y el 20% en la factura, para lo cual sería necesario un descenso entre el 30% y el 40% en el precio mayorista, matizó que dependerá de las condiciones meteorológicas y de la disponibilidad de recurso renovables, pero ve difícil llegar a un descenso del 30% del precio mayorista.
El precio promedio de la luz para los clientes de tarifa regulada vinculados al mercado mayorista subirá hoy un 4,4% con respecto a ayer, hasta los 270,17 euros por megavatio hora (MWH). Este aumento, que sigue al de ayer (258,68 euros/mwh), se produce después de los descensos registrados en el fin de semana, coincidiendo con la caída de la demanda y con el final de la ola de calor. Este precio para los clientes del PVPC es producto de sumar el precio promedio de la subasta en el mercado mayorista y la compensación que pagará la demanda a las centrales de ciclo combinado por la aplicación de la excepción ibérica para topar el precio del gas para la generación de electricidad.