Cs prolonga su agonía hasta refundarse para las municipales
● Inés Arrimadas no dimite, pero deja mayor visibilidad a la madrileña Begoña Villacís y al malagueño Guillermo Díaz ● El partido crea un organismo para tutelar la reforma prevista
Lo fácil habría sido dimitir, pero se quedan. La líder nacional de Ciudadanos, Inés Arrimadas, descartó ayer que ella y su dirección nacional vayan a marcharse después de la debacle electoral andaluza. Aunque hubiera sido lo fácil, sostuvo la jerezana en una rueda de prensa que dio tras las reunión de ayer de su dirección, y poco antes de verse con los 125 miembros del consejo general de Ciudadanos. Se quedan, pero el partido inicia una refundación, que durará unos seis meses y que volverá a tener una prueba de fuego en las elecciones municipales y autonómicas de 2023.
El partido crea un organismo para tutelar esta refundación, en el que destacan la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, posible sucesora de Arrimadas si dimitiera después de las municipales, y el diputado malagueño Guillermo Díaz. La primera será el “enlace” entre el partido y este equipo, y el segundo, su portavoz. La refundación
Ni Juan Marín ni Teresa Pardo participan ya en los órganos de dirección del partido
conlleva con cambio de nombres, que posiblemente será el de Liberales.
Ni Juan Marín, aún vicepresidente en funciones de la Junta de Andalucía, ni la ex portavoz parlamentaria Teresa Pardo participan ya en los órganos de dirección del partido. Ambos dimitieron después de que Ciudadanos no obtuviese ningún escaño en las elecciones del 19 de junio. Marín anunció su marcha la misma noche electoral, y lo de Pardo se ha sabido ahora.
La reunión del consejo general fue más movida que la de la dirección. Hay muchas voces críticas, algunas de las cuales habían solicitado la dimisión de todo el equipo. “Nosotros no vamos a ser un problema”, explicó Inés Arrimadas y señaló que dimitir no es “lo correcto”, a pesar de que tiene “el discurso en la cabeza”.
A su juicio, es la decisión más “cómoda”, pero trasladó que el resto de dirigentes de Ciudadanos
le han pedido “seguir fuertes”.
De la refundación, Arrimadas precisó que será “profunda” y que el objetivo es volver a “ilusionar” al electorado que “sigue aquí” y que “tiene que volver a sentir que Ciudadanos es útil” y “les represente en el sentido más amplio de la palabra”. La jerezana matizó que el proceso de refundación ya estaba “pensado”, y que los comicios andaluces sólo han “acelerado” la cuestión. Arrimadas anunció la constitución de un equipo político para concretar las labores del equipo técnico.
Junto a Villacís y Guillermo Díaz, en ese equipo estarán la alcaldesa de Ciudad Real, Eva Masías; el candidato de Santa Coloma, Dimas Gragera; el eurodiputado Adrián Vázquez; el concejal madrileño Mariano Fuentes; y las coordinadoras de Baleares y Comunidad Valenciana, Patricia Guasp y María Muñoz.
Según explicó Arrimadas, la segunda pata de la refundación será la participación de la militancia. Está prevista la creación de cinco grupos de trabajo en los que se podrá participar de una manera abierta y que podrá hacer propuestas programáticas y organizativas. La idea es que las conclusiones puedan conocerse el 16 de septiembre.
También habrá un órgano asesor externo, formado por personas que no son de Ciudadanos pero quieren que el partido exista, como intelectuales. Ciudadanos ya ha comenzado a prepararse las candidaturas para las elecciones, previstas para mayo de 2023. “Nos vamos a volcar”, avisó.
De igual manera, Inés Arrimadas indicó que asume los errores de esta etapa, pero insistió en que tiene el “convencimiento absoluto” de que Ciudadanos es “muy buen partido para España” y continúa siendo “imprescindible”.