Un matrimonio de Cádiz logra el perdón de una deuda de más de 153.000 euros
La pareja cumple los requisitos para beneficiarse de la Ley de Segunda Oportunidad
El Juzgado de Primera Instancia número 5 de Cádiz ha dictado un reciente auto por el que acuerda perdonar a un matrimonio gaditano una deuda de más de 153.000 euros al considerar que la pareja cumple los requisitos necesarios para beneficiarse de la Ley de Segunda Oportunidad.
El auto, con fecha de 27 de junio de este año, pone fin al concurso de acreedores en el que estaba inmerso el matrimonio desde el año 2015 y le reconoce “el beneficio de exoneración del pasivo insatisfecho”, un beneficio “definitivo” y que alcanza a toda la suma descubierta, 153.440,41 euros.
Así, la magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia número 5 de Cádiz, Ana María Chocarro López, estima que los deudores cumplen “todos los requisitos legalmente exigidos” para optar al régimen general de exoneración para saldar sus créditos pendientes con entidades financieras, préstamos que solicitaron para intentar reflotar un negocio familiar y para los que emplearon como aval su vivienda particular.
La primera condición que concurre en este caso es que son “deudores de buena fe” por dos razones. Por un lado, porque no han sido condenados previamente por delitos contra el patrimonio, contra el orden socioeconómico, falsedad documental, contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social o contra los derechos de los trabajadores. Por otro lado, porque no han sido declarados culpables en el concurso de acreedores.
Además, el matrimonio cumple otro requisito relativo al denominado presupuesto objetivo. Y es que la pareja asumió y abonó determinadas cantidades de “una masa pasiva” al tiempo que intentó llegar a un acuerdo extrajudicial de pagos con sus acreedores para satisfacer otras deudas.
El abogado que ha llevado este asunto, José María Puelles Valencia, explica que la pareja puso su empeño en reflotar un negocio en el que tenían a varios trabajadores asalariados a su cargo. “El matrimonio hizo todo lo posible para salvar su comercio y mantener los puestos de trabajo de sus empleados. De ahí que se haya descartado la negligencia en la generación de la deuda”.
Asimismo, el letrado subraya la relevancia de este auto, “dado que en la provincia de Cádiz no suelen dictarse muchas resoluciones a favor de la Segunda Oportunidad”.
Por último, el abogado destaca “el punto de partida” en el que se encuentra ahora matrimonio gaditano, “ya que podrá retomar su vida con otra actividad, por cuenta propia o ajena, sin temor a encontrarse con un embargo”, concluye.
La Ley de la Segunda Oportunidad es un mecanismo legal dirigido a particulares y autónomos sobrepasados por su situación de endeudamiento y que por circunstancias ajenas a su voluntad son incapaces de hacer frente a su pago.