Gobierno y Junta ayudarán a Abengoa pero sólo para “salvar lo que se pueda”
● La ministra Reyes Maroto da por liquidada a la matriz, ignora la oferta presentada en el concurso y se centra en Abenewco 1 y, dentro de ésta en las partes, con carga de trabajo
La reunión entre tres administraciones, Gobierno, Junta y Ayuntamiento, para abordar el rescate del grupo Abengoa, convocada por el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, para reaccionar ante la situación creada tras fracasar el rescate que intentaba por no ser viable a medio y largo plazo ni tener capacidad para devolver las ayudas, según dictaminó la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), concluyó con un compromiso de Gobierno, Junta de Andalucía y Ayuntamiento de ayuda pero para “salvar lo que se pueda salvar” del grupo.
Ése es el mensaje que dejó claro la de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, cuando compareció ante los medios de comunicación, una vez terminada la reunión que mantuvieron en la tarde de ayer en Fibes, durante unas dos horas, las tres administraciones con representantes
La ministra Maroto urge a la empresa a ser transparente sobre la situación del grupo
de la compañía, aunque sólo del sector que ha defendido la operación de rescate que ha fracasado.
Maroto anunció que las partes han pactado crear un grupo de trabajo para analizar un nuevo plan de viabilidad que tendrá como base el presentado por la compañía a la SEPI, al que habrá que hacer “algunos retoques”, dijo la ministra. A la vista de las duras críticas del organismo que agrupa a la industria estatal, esos “retoques” tendrán que ser profundos, porque en su negativa puso muy en duda la credibilidad de es plan de viabilidad.
“Hay que ser pragmáticos y hay poco tiempo”, enfatizó la ministra, que insistió en la idea de salvar aquellas empresas del grupo que tienen “carga de trabajo”, porque resaltó que la mayoría de filiales de la compañía están “sin actividad”, por lo que es “muy importante acotar” el escenario para “salvar la parte de la empresa que está facturando
un fondo de fondos soberano, todos extranjeros, que ofrece más de 200 millones por comprar todas las unidades productivas del grupo Abengoa y 300 millones en avales para poder desarrollar la actividad de ingeniería. Igualmente, el fondo cuenta con una cartera de proyectos, según añaden, por valor de 12.000 millones en la que Abengoa podría contratar.
La oferta no sólo apuesta por el mantenimiento de la matriz aportando fondos al concurso, sino que incluso vincula su oferta a que ésta no sea liquidada y conserve su ficha bursátil. Aunque no lo especifica, podría dar una salida a los accionistas ahora atrapados en Abengoa SA, cuya cotización cumplirá dos años suspendida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en pocos días.
Las fuentes conocedoras de la operación señalan que los inversores españoles que existían hasta se la semana pasada desistieron de participar en el reflotamiento del grupo una vez que se conoció el contenido del informe de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que denegó la ayuda pública de 249 millones de euros solicitada al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas por considerar que el deterioro financiero y los riesgos del grupo Abengoa no aseguraban su viabilidad a medio y largo plazo y que tampoco había quedado acreditada la capacidad para devolver los fondos públicos, 168 millones como prestamos participativos y 81 millones como préstamos ordinarios.
La presentación del recurso de reposición y del convenio con oferta llega cuando el juez ha ordenado la apertura de la fase de liquidación y la disolución de Abengoa SA, aunque su decisión no es firme.
CUESTIÓN DE PLAZO
Los abgados creen que la decisión se anticipó al fin del plazo, que interpreta que terminaba ayer a las 15:00 horas. Pero precismente la razón que esgrimió el magistrado para dictar el auto en el que tomó ambas decisiones es que había transcurrido el plazo sin existir una propuesta de convenio, y por ello acordó la apertura de la fase de liquidación del concurso de Abengoa SA. También acordó dejar en suspenso las facultades de administración de la concursada sobre su patrimonio con todos los efectos establecidos en el Capítulo II del Título VII de la Ley Concursal.
En consecuencia acordó igualmente disuelta la entidad Abengoa SA, por lo que cesa en su función a los administradores, actualmente Clemente Fernández, José Joaquín Martínez Sieso y José Alfonso Murat, y que éstos sean sustituidos por la administración concursal, ejercida por EY Abogados, aunque sin perjuicio de que los hasta ahora consejeros continúen “en la representación de la concursada en el procedimiento y los incidentes en los que sea parte”.
El juez también requirió a la administración concursal para que presente un plan de liquidación de los bienes y derechos integrados en la masa activa, esto el todo el grupo Abengoa, además de los pocos bienes que dejaron en la matriz, entre ellos el cuadro San Pedro Penitente –que es un BIC y está embargado por deudas con el Estado– y una residencia en La Antilla (Lepe, Huelva). El principal activo es Abenewco 2, sociedad instrumental que contiene garantías para los acreedores, dueña del 100% de Abenewco 2 bis, del mismo carácter de la anterior, que conserva la totalidad de las acciones de Abenewco 1, que es la instrumental en la que han concentrado todo el empleo, incluido el corporativo, y los distintos negocios, distribuidos en más de 300 sociedades.
Por último, el juez ordenó los trámites administrativos habituales para su publicación en el Boletín Oficial del Estado y el Registro Público Concursal, así como su anotación preventiva en el Registro Mercantil de Sevilla.
El auto del juez no afecta a las sociedades participadas del grupo que fueron puestas en preconcurso el pasado jueves, salvo en que forman parte, como queda dicho, de los activos a vender.
La solución propuesta es la única que aporta ingresos para los acreedores de la matriz