El viento complica los fuegos
● Pedro Sánchez visita Galicia, donde las llamas han arrasado más de 20.000 hectáreas mientras 25 incendios también se propagan por Castilla y León, Zaragoza y Guadalajara
El viento complica la extinción de los incendios que ya han devastado casi 20.000 hectáreas en Galicia, mientras Castilla y León está aún pendiente de los fuegos de Ávila y de Zamora, y nuevos incendios se activan en Zaragoza y en Guadalajara, región amenazada por un alto índice de propagación de las llamas. Los incendios forestales de Losacio (Zamora) y Cebreros (Ávila), los dos que más preocupan de los 25 fuegos aún no extinguidos en Castilla y León, han presentado una buena evolución en las últimas horas, aunque la comunidad está en alerta por el viento previsto, según las últimas informaciones de la Junta de Castilla y León.
El incendio de Zamora, en el que el domingo perdieron la vida dos personas –un bombero y un ganadero–, continúa activo y suma 34 poblaciones desalojadas, si bien los residentes de 20 de estos municipios pudieron ayer regresar a sus hogares gracias a la mejora en el control de las llamas.
En Ávila, la población de Hoyo de Pinares tuvo que ser evacuada en la noche del lunes a causa del avance del incendio de Cebreros.
El Gobierno autonómico precisó que las reactivaciones de esos dos incendios –el de Zamora y el de Ávila–, que eran esperadas, están siendo sofocadas con los medios aéreos que participan en el operativo de extinción. Algunas de las carreteras que habían sido cortadas por precaución fueron reabiertas, mientras en la línea de AVE Madrid-galicia los viajeros deben realizar el tramo entre Zamora y Sanabria por carretera.
Galicia lleva casi 20.000 hectáreas quemadas por los 16 incendios que han castigado especialmente a Orense y a Lugo, provincia en la que ya han ardido al menos 6.920 hectáreas. En esta comunidad los fuegos más peligrosos son el de Carballeda de Valdeorras (Orense), donde el viento complicó las tareas de extinción, y el de la zona lucense de Folgoso, donde en lugares como la Sierra de O Courel, un emblemático pulmón verde. Los cuatro incendios que afectan a la parroquia de Vilamor, en el municipio de Folgoso do Courel, y Saa, en A Pobra do Brollón, se han juntado en uno solo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó Orense, donde dijo que quedan “días difíciles en Galicia y el resto de España”.
En Cataluña, los bomberos dieron por estabilizado el incendio que desde ayer afecta a Àger y Camarasa (Lérida) y el de la comarca barcelonesa del Bages, fuegos que juntos han arrasado cerca de 1.800 hectáreas. La estabilización de este incendio permitió a los cerca de 200 vecinos de Bages que habían sido evacuados volver a sus casas acompañados y levantar el confinamiento que afectaba a unas 4.500 personas.
En Aragón, el incendio declarado el lunes en Ateca (Zaragoza) se reactivó y ahora está “fuera de la capacidad de extinción”, con rachas de viento superiores a los 50 km/h. También está en nivel 2 el incendio declarado en Valdepeñas de la Sierra (Guadalajara) en vista de la posible afección a bienes de naturaleza no forestal y la potencial afección por humo a la población, que ha sido confinada.