“Somos máquinas de precisión”
TERESA ARNANDIS
–¿Vende
la ciencia en las redes sociales?
–Es difícil que la ciencia llegue en las redes sociales. Hay que darle un toque de proximidad, cercanía para el público en general, pero sí, se puede aproximar la ciencia a la gente, y ésa básicamente es mi misión en redes, democratizar el conocimiento científico, que no sea elitista, inaccesible.
–¿Cómo surge la idea de hablar de ciencia en Tiktok?
–Toda la vida he sido una apasionada de la ciencia. A raíz de la pandemia, empecé a hacer vídeos para combatir la desinformación que había, sobre todo en cuanto al coronavirus. Era como una infodemia, teníamos la pandemia física y la pandemia digital de desinformación y bulos circulando: que si las mascarillas producían hipoxia, que de dónde había salido el virus, que si había que beber dióxido de cloro para curarse e incluso para prevenirlo... mucha desinformación que incluso atentaba contra la salud de las personas. Me vi con obligación moral de hacer vídeos que reflejaran información científica veraz. Éstos se hicieron muy virales. Desde entonces me dedico a eso, a contar en parte lo que es la ciencia al público en general y, a ser posible, influir en los jóvenes para que les guste la ciencia.
–¿Hay más interés por la ciencia a raíz del Covid?
–A partir del Covid la gente se ha dado cuenta de que la ciencia es superimportante porque si de esta pandemia hemos conseguido “salir” en un periodo de dos años, normalizar una situación, ha sido gracias a la ciencia,
–¿En qué ámbito científico ha hecho más daño la desinformación?
–Usted nombra las tres funciones primordiales de*