La ola de fuegos baja de intensidad por la mejoría de las temperaturas
Ahora hay focos sobre todo en Castilla-la Mancha y Valencia, pero no son tan peligrosos
La ola de incendios forestales que en los últimos días ha devastado decenas de miles de hectáreas, sobre todo en Galicia y en Castilla y León, continuaba ayer con menor peligro e intensidad en Castilla-la Mancha y en Valencia, ya que el viento y las temperaturas facilitan las tareas de extinción de los numerosos focos.
En Castilla-la Mancha, avanzaban favorablemente los incendios que hasta ahora más preocupan a la comunidad: un fuego que ha desalojado en Humanes (Guadalajara) a cerca de mil personas de dos municipios; cuatro en Ciudad Real y un sexto en Santajada (Toledo). En la Comunidad Valenciana, continuaban las labores de extinción del fuego declarado el lunes en el municipio de Calles (Valencia), que ha calcinado cerca de 230 hectáreas y sobre el que hay desplegadas cinco unidades de Bomberos Forestales, doce brigadas forestales, cinco autobombas, y 197 militares con 17 vehículos y dos drones de la UME; además de los medios aéreos.
En Castilla y León, quedan activos tres fuegos en León: uno en Balboa, otro en Matallana de Torío y otro en la pedanía de Montes de la Valdueza (Ponferrada), este último en nivel 1 de peligro tras haber arrasado casi 1.500 hectáreas desde su inicio hace ya nueve días.
En Burgos, también, el incendio forestal declarado este pasado domingo en Quintanilla del Coco ha bajado a nivel 1 de peligrosidad.
Galicia registraba a primera hora cuatro incendios forestales, dos de los cuales ya estaban estabilizados anoche y otros dos controlados, con 28.350 hectáreas en llamas repartidas por las provincias de Lugo y Orense. En Folgoso do Courel la nueva prioridad era “atender a la gente”. En Cataluña también respiran y en Cascastillo (Navarra) se habían retirado ayer las fuerzas desplegadas.