Unicaja Banco gana 165 millones en el primer semestre, un 62% más
● El “impulso de su actividad comercial” sigue siendo clave para que los números se mantengan en positivo
El Grupo Unicaja Banco registró un beneficio neto de 165 millones de euros durante el primer semestre de 2022, lo que supone un incremento del 62% respecto al mismo período del año anterior, según informó ayer miércoles la entidad.
El grupo explica en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que dicho resultado se apoya en la recuperación del margen de intereses en el último trimestre, con un aumento trimestral del 13,8%, en la consolidación de la aportación de los ingresos netos por comisiones, un 12,8% más interanual, en la reducción del 9% en términos interanuales de los gastos de administración, tras materializarse las primeras sinergias derivadas de los planes de reestructuración, y en la reducción del 43,6% interanual de las necesidades de saneamiento de crédito.
Asimismo, el margen de actividad bancaria (margen de intereses más comisiones menos gastos de administración) se incrementó en términos interanuales un 7,9%, mientras que el margen bruto creció el 0,8% y el margen de explotación antes de saneamientos, el 14,5%.
Unicaja muestra su satisfacción por el “impulso de su actividad comercial”, algo clave para que los números le sigan saliendo positivos. El banco detalla que ha incrementado los recursos administrados un 2,1% con respecto al trimestre anterior pese a un “contexto macroeconómico poco favorable para el ahorro, marcado por la alta incertidumbre y niveles de inflación, y elevada volatilidad en los mercados financieros”. Los depósitos a la vista están en 58.105 millones de euros y el ahorro a plazo en 5.543 millones de euros. Los fondos de inversión, por su parte, están en 11.759 millones, un 2,7% más interanual, tras suscribir 379 millones en el primer semestre.
El banco andaluz ha dado 5.300 millones de euros en créditos nuevos entre enero y junio, un 23% menos que en el mismo periodo del año anterior. De ellos, 2.284 millones fueron hipotecas alcanzando una cuota de mercado nacional del 8,4%. En total, el grupo presidido por Manuel Azuaga posee una cartera de 54.237 millones de euros en créditos no dudosos de cobro.
Unicaja lleva a gala tener una inversión crediticia “altamente diversificada”, reduciendo así los riesgos de impagos. El 58% de los créditos son hipotecarios (31.528 millones), el 24,4% son concedidos a empresas, el 11% a administraciones públicas y el 6,5% a consumo.
Una de las principales batallas de las entidades financieras tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, allá por 2008, ha sido luchar contra la morosidad. Se les disparó por los impagos de empresas
La entidad otorga 5.300 millones de euros en créditos nuevos entre enero y junio
promotoras y particulares que no pudieron hacer frente al pago de sus viviendas por la crisis y los despidos. Con el paso de los años la situación ha ido mejorando y, en estos momentos, la tasa de morosidad de Unicaja Banco está en el 3,5%, cinco décimas menos que la media nacional. Es el mismo porcentaje que en 2021, pero está muy alejado, por ejemplo, del 9,1% que se registró en 2017 y que ocasionaba un auténtico quebradero de cabeza para los gestores de la entidad. Unicaja se ha ido quitando viviendas de encima, suelos, oficinas y obras en curso por valor de 315 millones de euros en el primer semestre, reduciendo así su stock de activos inmobiliarios adjudicados un 17%.
Baja la morosidad y, de forma paralela, aumenta la cobertura, es decir, el dinero que tiene para hacer frente a los impagos. La cobertura total, tanto de activos dudosos como de adjudicados, es del 65% frente al 49% que había en 2017 y en Unicaja afirman que está “entre las más elevadas de los bancos españoles”.
El margen de intereses ha sido de 502 millones de euros, un 7% menos que en junio de 2021, mientras que el margen bruto ha ascendido a 825 millones de euros, un 0,8% más interanual. En este último caso hay que recordar que, además de incrementar los ingresos, Unicaja está reduciendo los gastos para obtener beneficios y, en este sentido, los gastos de administración han descendido un 9% y los de personal un 11,4% fruto de la salida de trabajadores tras el pacto alcanzado en diciembre con los sindicatos.
El margen de explotación antes de los saneamientos ha sido de 389 millones de euros, un 14,5% más, y todo deriva finalmente en un beneficio antes de impuestos en el primer semestre de 225 millones de euros, un 69,8% más que hace un año, quedando el resultado neto en los 165 millones indicados anteriormente, un 61,8% más.
La esencia del negocio bancario, al margen de números y porcentajes de subida o bajada, está en su solvencia y su liquidez. De poco sirve tener un gran activo si se es incapaz de responder a la demanda de retirada de dinero de los clientes o hacer frente a cuestiones inesperadas.
Unicaja siempre ha presumido de tener unos niveles altos de solvencia y liquidez, lo que le ha permitido, por ejemplo, sobrevivir a la caída de numerosas cajas de ahorro durante los años de la recesión. Unicaja es el único banco andaluz que sigue vivo e independiente de otras entidades, tras las absorciones de Cajasol, Cajasur o Caja Granada. De hecho, no solo no ha caído sino que ha ido comiendo peces más pequeños, como Ceiss o Liberbank, hasta posicionarse como el quinto mayor banco del país.
El banco andaluz afirma que, pese a la nueva integración con Liberbank, mantiene “unos elevados niveles de solvencia”. Se miden en términos muy especializados como CET 1, Capital Total o ratio Texas y, en todos ellos, explican que sus números son mayores a los exigidos por el Banco Central Europeo. En el CET 1, por ejemplo, el exceso de capital sobre los requerimientos regulatorios es de 1.583 millones de euros.
Siempre ha presumido de tener unos niveles altos de solvencia y liquidez