La tregua entre Israel y la Yihad Islámica da un respiro a Gaza, que llora a sus muertos
Una delegación egipcia supervisa el alto el fuego mientras la Franja va recuperando la normalidad
Israel y la Yihad Islámica Palestina mantienen el alto el fuego que entró en vigor la noche del domingo para poner fin a tres días de intercambio de fuego con Gaza, sumida en una eterna crisis humanitaria mientras llora a los 44 muertos palestinos que ha causado esta nueva escalada. Con la mediación de Egipto, las partes alcanzaron el domingo una tregua que ha evitado una escalada bélica de mayores proporciones, aunque se trata de la más grave desde mayo de 2021, con un total de 44 muertos, entre ellos 15 menores, y 360 heridos, según cifras del Ministerio de Salud palestino.
Una delegación egipcia se desplazó ayer a la zona para supervisar el alto el fuego, que ha implicado que Israel levante las restricciones de seguridad en las zonas colindantes a la franja, y la reapertura del cruce de Erez, que ha permitido la entrada de ayuda humanitaria y de combustible vital para la única planta eléctrica del enclave, donde desde el sábado sólo funcionaba la corriente durante cuatro horas al día.
Gaza retomó ayer paulatinamente la normalidad en las primeras horas de alto el fuego con la reapertura de tiendas, bancos, escuelas e instituciones oficiales, mientras decenas de personas se agolparon en los hospitales para visitar a los heridos en la ofensiva israel. Además, decenas de personas se acercaron a los velorios de los fallecidos, sobre todo a las casas de los dos principales comandantes militares del brazo armado de la Yihad Islámica, las Brigadas Al Quds, Taysir al Yabari y Khaled Mansur, asesinados en bombardeos israelíes.
En los tres días de escalada, la Yihad Islámica lanzó 1.200 cohetes desde Gaza, de los que unos 1.000 cruzaron a territorio israelí, pero la mayoría (96%) fueron interceptados por el sistema antimisiles israelí Cúpula de Hierro.