Utrecht ya late fuerte
LXXVII VUELTA A ESPAÑA ● La Vuelta se presenta muy abierta ante las ausencias del podio del Tour: Vingegaard, Pogacar y Thomas
La Vuelta a España saldrá por cuarta vez fuera de sus fronteras. Utrecht, en el centro de los Países Bajos, pasará a la historia por haber acogido en sus calles a las tres grandes pruebas, el Tour (2015), Giro (2010) y ahora la ronda hispana es recibida con entusiasmo, demostrando que por algo se habla del país de las bicicletas, donde el 99% de la población da pedales, y un 63 de manera diaria como medio de transporte principal. Ya lanzó la prueba desde Assen en 2009. Ahora, en la 77 edición, estas tierras conocidas por sus canales, tulipanes, molinos y bicicletas, ofrecen tres etapas, una crono por equipos y dos llanas antes del salto a España vía Euskadi.
La Vuelta se presenta más abierta que nunca, con una buena participación a pesar de las ausencias de los protagonistas del podio del Tour: Vingegaard, Pogacar y Thomas. Fiel a su idiosincrasia tendrá un marcado carácter montañoso.
En el resumen general figuran seis etapas llanas y dos llanas con final en alto, siete etapas de montaña, una crono por equipos (23,3 km) , una individual (30,9 km) y tres días de descanso.
LA MONTAÑA
Los finales elevados inéditos serán Pico Jano (Cantabria, 6ª etapa), el Collau Foncuaya (Asturias, 8ª), el Pico de los Reales (Málaga, 12ª), Monasterio de Tentudía (Extremadura, 17ª) y Alto del Piornal (Extremadura, 18ª). El final será explosivo con la tradicional y muchas veces decisiva etapa de la Sierra de Guadarrama de Madrid.
La crono por equipos dirá quién estrena la camiseta roja de líder y quien la defenderá en las siguientes dos etapas en los Países Bajos, propicias para el esprint con meta en Utrecht de nuevo y en Breda. Lazos culturales e históricos en tierras neerlandesas.
Una jornada de descanso llevará al pelotón al País Vasco, para la cuarta etapa entre Vitoria y Laguardia, terreno de media montaña para abrir boca ante la siguiente jornada entre Irún y Bilbao, donde ya esperan cinco puertos.
El trayecto entre Bilbao y el Pico Jano, en Cantabria (12,6 km al 6%) descubre el primer final en alto novedoso, una dificultad que ya puede empezar a pasar factura. Esta primera semana se cierra en tierras leonesas, en Cistierna, que incluye el ascenso a San Glorio.
SIN LAGOS NI ANGLIRU
No faltará el protagonismo asturiano. Este año no habrá Lagos de Covadonga ni Angliru, pero sí el inédito Collau Fancuaya, un puerto de 5,7 km al 7,8% y rampas del 16. Jornada con otros 4 ascensos y 3.300 metros de desnivel, con pasos por La Colladona, La Mozqueta, Santo Emiliano y Tenebredo.
El primer asalto de montaña astur se completará con la etapa entre Villaviciosa y Les Praeres, final elevado con una subida de 4 kilómetros al más del 12% de media. Dura prueba ese día con 5 dificultades,como el Mirador del Fito.
VALVERDE Y ANDALUCÍA
La organización de la ronda homenajeará a Alejandro Valverde en su última Vuelta con la salida desde Murcia tras la crono. El Bala pasará por su tierra por última vez en su Vuelta número 16. La meta del trayecto será el Cabo de Gata, en Almería, donde esperan paisaje de ensueño en la cita de esprinters.
La cita almeriense será el punto de partida para un hecho histórico, pues por primera vez en la historia la Vuelta pasará por las ocho provincias andaluzas. La duodécima etapa entre Salobreña y Peñas Blancas llama a los escaladores. El puerto subirá 4 kilómetros más, hasta el Pico de los Reales, para completar un esfuerzo de 21.
La tercera y última semana de carrera tendrá en Sierra Nevada el único puerto de categoría especial en la ronda 2022. Será una auténtica prueba de fuego antes de la segunda jornada de descanso, con 20 kilómetros de subida, y la meta por encima de los 2.000 metros; con más de 4.000 metros de desnivel la etapa incluye el Alto del Purche y el de Hazallanas.
Siguiendo por Andalucía la caravana entrará en Sanúcar de Barrameda para concluir con un esprint en Tomares (Sevilla), y en la 17ª etapa se saldrá de Aracena (Huelva) para entrar en Extremadura, en Tentudia, etapa rompepiernas con final en alto inédito no demasiado exigente, pero donde nadie se deberá confiar.