Marlaska justifica la actuación policial ante el ataque “violento” en el asalto de la valla de Melilla
Sobre las 08:00 había unos 1.700 inmigrantes dentro del recinto fronterizo divididos en dos grupos
Casi tres meses después de la tragedia en la frontera de Melilla con Nador en la que murieron al menos 23 inmigrantes, el ministro del Interior, Fernando Grandemarlaska, remarcó que la actuación policial fue “proporcionada” al ataque “violento”, “organizado” e “intolerable” de unos 1.700 personas.
Durante cuatro horas rindió cuentas este miércoles en el pleno del Congreso donde recibió las críticas por la respuesta del Ejecutivo ante los sucesos del 24 de junio de todo el arco parlamentario, excepto de su socio Unidas Podemos, cuyo portavoz Enrique Santiago no reprochó la gestión de lo sucedido y se limitó a solicitar un protocolo para quienes piden asilo en el mismo puesto fronterizo.
Las explicaciones de Marlaska sobre los sucesos, en los que según las ONG fallecieron 37 migrantes, son las primeras que ofrece en sede parlamentaria tras la petición de varios grupos, entre ellos ERC y EH Bildu, que finalmente retiraron la solicitud de que fuera Pedro Sánchez quien compareciera en el Congreso.
“Es evidente que estamos hablando de un episodio de intento violento de entrada irregular que es injustificable”, reiteró el ministro tras relatar cronológicamente lo que sucedió en Nador en su frontera con Melilla.
Marlaska declaró que “un país democrático” en modo alguno “puede aceptar” que su frontera y los agentes que la “custodian y protegen” se vean agredidos “con el lanzamiento de piedras, palos e incluso artefactos incendiarios caseros” protagonizado por 1.700 personas.
Según expuso, a las cinco de la madrugada de ese día las fuerzas de seguridad marroquíes alertaron a la Guardia Civil de que un grupo “muy numeroso” y “organizado” avanzaba hacia el vallado “portando objetos ofensivos y palos”.
El ministro detalló que las autoridades marroquíes intentaron evitar el primer acercamiento, si bien se vieron superadas por otro grupo “extremadamente violento” que logró acceder al interior de la aduana marroquí tras forzar con violencia las puertas con el uso de “mazas, hachas y otros objetos contundentes”.
Mientras, otro centenar de migrantes escalaba el muro exterior del vallado marroquí que terminó desplomándose, de forma que sobre las 08:00 había unos 1.700 inmigrantes dentro del recinto fronterizo divididos en dos grupos.