Coacciones rusas a punta de fusil para participar en los referéndum
● Los apoderados apuntan los datos de las personas que votan en contra de la anexión
Las autoridades prorrusas en el este y sur de Ucrania afirmaron que se registró una participación elevada en la primera jornada de votación en los referéndum de anexión, que entraron ayer en su segundo día mientras residentes y fuentes ucranianas denuncian coacciones para votar en la consulta. La participación en la primera jornada de la votación fue del 23,64%, en tanto que en la vecina Lugansk fue del 21,97%, según el líder de la autoproclamada república de Donetsk, Denis Pushilin.
“Siempre estoy cerca de Rusia y me considero rusa. Aunque nací y crecí en Lugansk, donde he estado viviendo 64 años, siempre quería estar cerca de Rusia”, señaló a la agencia oficial TASS Lyubov, la primera en introducir su voto ayer en esta región prorrusa. Una mujer de 60 años que votó en la localidad de Brianka de Lugansk afirmó que “por fin llegó este día”.
“Yo siempre estuve a favor de Rusia y quiero ser parte de Rusia”, señaló delante de las cámaras del Centro de Información de la autoproclamada república popular, en un esfuerzo por difundir sólo aquellas voces que apoyan la anexión.
En otro vídeo, una joven residente en la ciudad de Antratsit, calificó de “histórica” la jornada de ayer añadió: “Voto por la paz, la felicidad y nuestro bienestar”. “Hoy hemos hecho nuestra opción en favor de Rusia. Hace tiempo que queríamos hacerlo. Ocho años esperamos este momento. Todos estos ocho años Rusia nos apoyó”, dijo a su vez el jefe del Endocrinología del Hospital Nº2 de Lugansk, Alexei Kovalenko.
En el sureste, en la región de Zaporiyia, la presidenta de la comisión electoral, Galina Katiushchenko, aseguró que el 20,5% de los votantes ya participaron en el referéndum de anexión a Rusia. La asistencia a la consulta en de Jerson, a su vez, fue del 15,3%.
Ni en Rusia ni tampoco en Kiev y Occidente se duda de que el resultado de los referendos, cuya votación se prolongará aún hasta el martes, será favorable a las pretensiones del Kremlin de anexionarse estas cuatro regiones ucranianas, ninguna de las cuales controla totalmente, al igual que hizo en 2014 con Crimea.
En Donetsk y Lugansk “aproximadamente un 90% votarán” a favor de que estas dos regiones –reconocidas como independientes por el Kremlin tres días antes de la invasión de Ucrania– se incorporen a Rusia, según fuentes de la administración rusa.
En muchas zonas, comisiones electorales ambulantes se desplazan de edificio en edificio, acompañadas de soldados armados, para garantizar la seguridad de los residentes, aunque según Kiev se trata de aumentar a toda costa la participación.
Viktor, que vive en un pueblo al sur de Jerson, contó que la comisión electoral acudió a su vivienda. “Eran tres, acompañados de varios soldados con armas automáticas”, relató. Apuntaron los datos de su pasaporte y le dieron una papeleta. “Marqué el yla metí en la urna”, asegura Viktor, según el cual otros vecinos simplemente marcaron la casilla que se
les indicó “bajo la atenta mirada y los rifles automáticos de los hombres armados, quisieran o no”.
En algunos casos los apoderados apuntan en una libreta los datos de las personas que votan en contra de la anexión, con propósito desconocido, o les amenazan con expulsarles de sus casas si no marcan la casilla correcta, según un canal de Telegram que recoge testimonios de residentes de Jerson.
Por otro lado, Rusia reemplazó ayer a su militar de mayor rango a cargo de la logística de la campaña bélica en Ucrania cuando se
El Kremlin destituye al general de logística bélica y lo releva el ‘carnicero de Mariupol’
cumplen siete meses de la guerra sin que el Kremlin haya logrado sus objetivos, que ahora pretende lograr con una movilización parcial y referendos de anexión.
“El general Dmitri Bulgakov fue relevado de su cargo de viceministro de Defensa de Rusia debido a que recibió otro destino”, señaló escuetamente el Ministerio de Defensa. En su lugar fue designado el general coronel Mijail Mizintsev, hasta ahora jefe del Centro de Control de Defensa Nacional de la Federación Rusa y quien fue el encargado de “dirigir personalmente” el asedio a la ciudad portuaria de Mariupol, según Ucrania. Los medios occidentales lo bautizaron por ello como el