Jxcat pone en manos de la militancia abandonar el ‘Govern’
de la coalición y a quienes, en cambio, abogan por abandonar ya el
El primero de los acuerdos, verbalizado por Turull, consiste en hacer llegar a Aragonès una última propuesta de entendimiento, que plantea “concreción, garantías y plazos” para dar cumplimiento a los tres puntos del pacto de legislatura que Jxcat exige obedecer: reactivación de un Estado Mayor del unidad en Madrid y negociación de amnistía y autodeterminación en la mesa de diálogo. Según diversas fuentes, Jxcat también exige a Aragonès que restituya en el cargo a Puigneró, cuya vacante no piensa cubrir Junts con ningún nombre alternativo.
Jxcat sólo se da 72 horas para intentar alcanzar un acuerdo con Aragonès al que ha sido imposible llegar durante semanas, un plazo aún más complicado teniendo en cuenta que mañana será un día en que los dirigentes independentistas estarán ocupados con la conmemoración del
Aragonès no ve ningún cambio en Junts y pide que aclaren “si quieren ser ‘Govern’ u oposición”
quinto aniversario del referéndum unilateral del 1-O.
Una vez haya vencido este ultimátum, la dirección de Jxcat se volverá a reunir el lunes para evaluar los resultados de esta negociación exprés y convocará una consulta a sus bases los días 6 y 7 de octubre, según dijo Borràs, para decidir si hay que continuar en el o pasar a la oposición. Será el lunes, pues, cuando la ejecutiva del partido concretará la pregunta que someterá a votación en la consulta y cuyo redactado dependerá de cómo haya terminado la negociación con Aragonès. Mientras tanto, todos los de Junts pusieron su cargo a disposición de lo que decida el partido.
Poco después, fuentes del entorno de Aragonès explicaron que el aún no conoce su última propuesta, si bien apuesta por “mantener la coalición con Junts”, aunque pide que sus socios digan “claramente si quieren ser u oposición”.