La tradición gaitera de Carlos III al despertarse
● A las 9, allá donde esté el monarca, suena una gaita como se hace en palacio desde el año 1843
Carlos III, que será coronado el próximo 6 de mayo, comienza a ampliar su agenda real y a ir incorporando labores que le correspondía a su madre, Isabel II, de la que se ha cumplido un mes de su fallecimiento. El recuerdo y el respeto a la longeva soberana va a acompañar al ya anciano monarca que intentará dar un estilo propio a la institución sin perder las referencias de lo que fue todo el prolongado período de reinado de su madre.
El rey británico mantiene el toque de diana al estilo del que tuvo su madre para despertarse a diario en los distintos recintos donde podía dormir, desde Balmoral al castillo de Windsor, sus dos lugares favoritos, o el mismísimo palacio de Buckingham.
Es, de nuevo, un homenaje a Escocia con el que Isabel II mantuvo su reconocimiento a lo largo de los años y que Carlos de Inglaterra también ha adoptado. Al rey de Inglaterra y a su consorte, Camila, le despierta todos los días los sones de una gaita escocesa a modo de toque de diana en los palacios. Esta tradición escocesa se remonta a 1843. Un gaitero acompañó durante más de medio siglo a la reina Victoria. Adoptó la tradición del marqués de Breadalbane, que era quien deseaba que los sones de la gaita rompieran al alba en su mansión. En 1853 la emperatriz adquirió Balmoral para disfrute de ella y de su marido, el príncipe Alberto. Estaban prendados de los paisajes de Escocia y del modo de vida de sus habitantes.
El encargado de tocar la gaita a primera hora para Carlos III es el gaitero mayor Paul Burns, el mismo que despidió a Isabel II en su funeral, Burns ocupa el puesto de intérprete de la diana de los palacios desde
El gaitero Paul Burns fue el que intervino en el funeral de Isabel II
el año pasado, en que sustituyó a Richard Grisdale. Es el 17º gaitero mayor que ha tenido la casa británica. Su primer toque con el nuevo rey fue el pasado 4 de octubre en Balmoral.
La melodía resuena a las nueve de la mañana. Es la hora en la que todo el palacio está ya presto a su trabajo diario. Y el monarca y su esposa puede ser que ya estén levantados, pero al menos es la hora límite para comenzar el día y ser despertados por el personal de servicio, con este tradicional gaitero de las Tierras Altas escocesas.