El Gobierno desliga la reforma de la sedición del respaldo de Esquerra a las cuentas
Pedro Sánchez volvió a afirmar ayer que no cuenta con los apoyos parlamentarios suficientes para acometer la reforma del delito de sedición, que ERC pone como condición para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE). A este respecto señaló que su posición es conocida y que considera que España tiene un Código Penal que en algunos delitos “no es homologable” a otras democracias europeas. “No es algo que diga la política, lo dicen los propios penalistas”, afirmó en una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Europeo.
Así, señaló que esto “no puede ser un ejercicio de teoría sino que se tiene que fraguar en las Cortes” y por tanto necesitan apoyos. “A día de hoy no parece que los tengamos”, trasladó, antes de asegurar que si esa mayoría parlamentaria “se produce”, el Gobierno cumplirá con ese compromiso.
Además, quiso separar esta reforma de la aprobación de los PGE al apuntar que “nada tiene que ver una cosa con la otra” y que las cuentas son necesarias para dar una respuesta a la crisis y al órdago lanzado por el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
El jefe del Ejecutivo hizo estas declaraciones después de que ERC anunciase que no va a presentar enmienda a la totalidad al proyecto de Presupuestos –al igual que Bildu y PNV–, lo que permite que siga avanzando el trámite parlamentario.
Sobre este mismo asunto, la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, respondió ayer a la petición de ERC de reformar el delito de sedición para dar su apoyo al Presupuesto, que de esta cuestión podrán hablar “después”, en otro momento, pero que ahora la “prioridad” es la protección de las clases medias y trabajadoras en los PGE.
Durante su visita al Ayuntamiento de Arganda, la portavoz del Ejecutivo recordó a ERC que en las cuentas públicas para 2023 hay “argumentos suficientes” como para que las apoye.