BBVA se acoge a su derecho a no declarar en el caso por los encargos a Villarejo
El representante legal del banco opta por guardar silencio en la instrucción de la causa
El representante legal de BBVA se acogió a su derecho a no declarar durante la comparecencia fijada para ayer miércoles por el juez que investiga los presuntos encargos ilegales de la entidad bancaria al ahora comisario jubilado José Manuel Villarejo, en el marco de lo que se perfila ya como la recta final de esta pieza separada.
El titular del Juzgado Central de Instrucción Número 6, Manuel García Castellón, había citado al representante legal de BBVA para las 10:00 de este 26 de octubre como parte de sus pesquisas sobre los contratos del banco con el grupo empresarial de Villarejo, CENYT, una relación que habría comenzado en 2004 y se habría extendido hasta 2017 y por la que el ex comisario se habría embolsado más de 10 millones de euros.
Sin embargo, las fuentes jurídicas indican que el representante legal optó por guardar silencio, a lo que tiene derecho al obrar en nombre de BBVA, que se encuentra imputada.
De acuerdo con las citadas fuentes, el representante legal explicó que no iba a declarar porque BBVA recurrió la decisión de García Castellón de investigar también al banco por los “hechos nuevos” a los que amplió sus pesquisas en julio y aún está pendiente de que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional (AN) le responda.
García Castellón avanzó en julio que emprendería una nueva ronda de declaraciones en la que incluiría a la entidad bancaria para “poder determinar el interés de BBVA, como persona jurídica, o de sus empleados, a título personal, para encargar los trabajos a CENYT” sobre casi 70 personas a las que ofreció personarse como perjudicados.
Entonces, el instructor prorrogó la investigación para poner la lupa en unos “hechos nuevos” encontrados en otra pieza separada (Kitchen) donde se localizaron dos oficios policiales que reflejarían el contenido del teléfono móvil de Antonio Bonilla –un ex policía que colaboró con CENY T–, del que se deduciría que BBVA habría contratado también a su empresa, ANBYCOL.
BBVA cree que esos oficios surgieron como consecuencia de una investigación llevada a cabo a sus espaldas, por lo que sostiene que dichas indagaciones son nulas. El instructor rechazó esta tesis, aclarando que “no ha habido ninguna investigación secreta”, pero la entidad bancaria volvió a recurrir.
El juez citó para el próximo mes a varios empleados de BBVA y el 15 de diciembre escuchará al ex presidente del banco Francisco González, que se ofreció a volver a declarar, a pesar de que ya lo hizo en 2019. Su defensa adujo que entonces la causa estaba secreta y es ahora cuando pudo tener conocimiento de todo lo investigado.
También llamó a sede judicial a Bonilla, a un empleado de BBVA y a varios policías pero, al igual que el representante legal de la entidad financiera, se acogieron a su derecho a no declarar.
Fuentes jurídicas señalan que los investigadores esperarán a tomar declaración a las personas ya citadas para decidir después sobre la continuidad de la fase de instrucción.