Un voluntario para arreglarle el embrague al coche de Alejandro

¿Alguien tiene un taller mecánico y puede arreglarle el coche a Alejandro? No cuenta con demasiados recursos. Él ha preguntado y le dicen que el arreglo le puede salir por una cantidad que, ahora mismo, para él es inalcanzable. Dice estar seguro de que se trata de algo relacionado con la caja del embrague o algo así. Sería ponerle una pieza original o bien encontrarle una de segunda mano que pueda resultar algo más baratita. Y, aparte, lo que cueste la mano de obra. Nunca había pensado hacer esta petición pero fue este Diario el que le hizo la propuesta para que fuera él el que pidiera ayuda a los gaditanos “que sé que siempre han sido los número uno en los temas solidarios”. lágrimas y una alta dosis de odio contra su familia, que no le permiten acceder a la que él dice que es su vivienda de la que, al menos unos cuantos metros le pertenecerían. Unos cuantos metros de la vivienda así como de un garaje y de un trastero ubicados en ese mismo edificio de los que también es copropietario.

Alejandro reconoce que ha sido adicto a la droga y que ésta le llevó en parte hasta donde está ahora. La droga y una mala vida que reconoce no haber sabido controlar.

Ahora vive ahí, en su Fiat Stilo. Los hermanos, siempre según el testimonio del propio Alejandro, han cambiado la cerradura y han colocado una alarma que impide a Alejandro entrar en la que, según él cuente, aún sigue siendo su casa y en la que vivía junto a su hermano gemelo hasta que éste decidió irse antes de que le tocara.

¿Y de qué vive Alejandro? Al estar incapacitado tiene una pensión de algo más de 800 euros y su pareja, Vanesa, cobra unos 400 euros que ahora están, al parecer, a punto de desaparecer. Precisamente Vanesa no estuvo presente durante la entrevista porque la madre la había llamado por teléfono porque le había llegado a su casa una carta