Díaz sortea las invectivas de Iglesias
● “Sumar no viene a hacer ruido”, replica tras ser tildada de “cobarde”
Un día después de que Pablo Iglesias dijera que “ponerse de perfil” cuando se “machaca a una compañera”, en referencia a la ministra de Igualdad, Irene Montero, “no sólo es miserable y cobarde, sino políticamente estúpido”, en clara alusión a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ésta prefirió no entrar al trapo en la presentación de la plataforma Sumar en Valencia y sortear las invectivas del ex líder de Podemos.
Díaz insistió en el acto que Sumar es un proyecto político que “no va de ganar a la derecha”, sino que de “cambiar la vida de la gente, de cambiar el país”. Subrayó que el movimiento es ya “imparable”, para lo que ha pedido “no distraerse ni hacer ruido” porque, quien lo hace, “no sirve para el fin de cambiar nuestras vidas”.
“Vamos a la política para cambiar la vida de la gente, no vamos a la política para hacer ruido ni para jalear”, proclamó durante su intervención en un nuevo acto del proceso de escucha de su plataforma, celebrado en esta ocasión en Feria Valencia. Díaz precisó que para ello todas las personas “son imprescindibles” en Sumar, donde “no sobra nadie” porque esperan a “muchísima más gente” para “cambiar las cosas”. “Aquí sólo estamos por una razón: la gente”, remarcó.
En este sentido, señaló la importancia de que todas las personas “formen parte de la misma cuerda”, estén “en el lado que estén”. “Nos necesitamos todas para sumar, no le pedimos el carné a nadie, les pedimos la asignatura más difícil en la vida pública: la ternura”, abundó, al tiempo que garantizó que Sumar “va a cambiar la vida de la gente”. “Y ahí voy a estar”, agregó.
En su intervención, abordó el “grave problema” que tiene España a día de hoy con la inflación y ha reconocido que resulta “muy difícil” trabajar para descender sus niveles. No obstante, defendió que el Gobierno “está demostrando” que, “cuando actúa, baja la inflación”. “Decían que no se podía intervenir los precios, que no se podía gravar a las eléctricas, que Europa no lo permitiría, y el resultado es no sólo que ha sido posible, sino que ha sido eficaz para la vida de la gente”, reivindicó.
Por otro lado, Díaz cargó contra las grandes distribuidoras del sector de la alimentación, que tienen “nombres y apellidos”, a las que acusó de “estar forrándose” con el aumento de los precios. “Están aumentando de manera escalonada sus beneficios”, ha censurado. Frente a esta situación, subrayó que es “imprescindible” garantizar una cesta de la compra “para la gente de nuestro país”. “No estamos actuando”, alertó.
Mientras, el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, aseguró ayer en Cáceres que hay “jueces machistas” que están llevando a cabo “una cacería” contra Irene Montero, “jaleados por PP y Vox”, en relación a las reacciones suscitadas por las rebajas de condenas que se están presentando acogiéndose a la ley del sólo sí es sí.
Desde Las Palmas, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendió la ley como la “gran conquista del feminismo” y apuntó que el Ejecutivo va a seguir “defendiendo una legislación” en la que “no haya lugar a la duda” cuando una mujer dice que no. Montero recalcó que van a pedir una “armonización de doctrina”.
El líder de Más País, Íñigo Errejón, instó al Gobierno a solucionar los “resultados indeseados que nadie querría ver” en la aplicación de la ley, al tiempo que pidió al Ejecutivo “calma”, “prudencia” y “pragmatismo”.