La obligatoriedad del velo se mantiene pese al fin de la Policía de la moral iraní
Aseguran que se buscan maneras más “modernas” para aplicar las leyes de la castidad y el hiyab
El fin de la temida Policía de la moral supone la primera victoria de los manifestantes que protestan desde hace casi tres meses en Irán, pero todo parece indicar que la obligatoriedad del velo se mantendrá y solo cambiarán los métodos para imponerlo.
Tras casi tres meses de protestas, más de 400 muertos y miles de detenidos, las autoridades iraníes empiezan a dar su brazo a torcer para tratar de controlar las movilizaciones desatadas por la muerte de la joven Mahsa Amini tras ser detenida precisamente por la Policía de la moral por llevar mal el velo islámico.
Pero la desaparición del cuerpo que desde hace años trata a las mujeres como criminales por no taparse el pelo con un velo, llevar botas altas o no cerrarse bien el abrigo no parece que vaya a garantizar las libertades que piden los manifestantes al grito de “mujer, vida, libertad”.
“La misión de las patrullas de la Policía de la moral ha terminado”, declaró el portavoz del Centro de la Promoción de la Virtud y Prohibición del Vicio, Ali Janmohamadi.
Pero Janmohamadi afirmó que su organismo, que vigila la moral y las costumbres en el país persa, busca maneras más “modernas” y para aplicar las leyes de la castidad y el hiyab.
Esas declaraciones han sido avaladas por otras autoridades que afirman que en los próximos días se anunciarán nuevas políticas del velo, obligatorio desde 1983.
El hiyab es uno de los símbolos de la República Islámica fundada en 1979 por el ayatolá Ruhola Jomeini, quien definió la prenda como la “bandera de la revolución” y sin la cual las mujeres estaban “desnudas”.