PUNTOS A REVISAR
MOTOR
El Lupo GTI está muy bien fabricado y resulta fiable, aunque no está libre de problemas. Lo primero que hay que averiguar es si el motor quema aceite. Coches con muchos kilómetros –normalmente, de 180.000 km en adelante– han sufrido fallos en los segmentos, dando como resultado cilindros arañados y otros que han roto los sellos de las válvulas. Así, hay que estar al tanto con las manchas de aceite en el paragolpes trasero o cualquier humo azul.
El motor debería calentarse hasta los 90 grados y mantenerse ahí; si no lo hace, seguramente necesita un termostato o un sensor de temperatura. Es una avería común, pero ‘barata’. Que falle algún cilindro o un ralentí bajo suele indicar que hay que sustituir las bobinas o los cables de encendido.
TRANSMISIóN
Ambas cajas de cambio, de cinco y seis velocidades, son más robustas que la frágil transmisión del Polo GTI; aunque algunas de cinco marchas sufren averías relativas al eje principal y los sin- cronizadores, lo que puede llevar a que salten las marchas. Si el cambio está duro, probablemente la torreta de la parte superior de la caja necesita lubricación. En general, es mejor optar por una unidad con la transmisión de seis marchas.
SUSPENSIóN, DIRECCIóN Y FRENOS
Siendo un coche ligero, el Lupo es poco exigente con la suspensión y los frenos. Cualquier traqueteo que escuches estará provocado, casi seguro, por los silentblock de la barra estabilizadora. Instalar amortiguadores ajustables es una modificación común y no deberían dar problemas si no se ha rebajado mucho la altura del coche. No obstante, lo mejor para mantener el valor futuro del coche son los originales.
CARROCERíA, INTERIOR Y ELECTRICIDAD
La originalidad es la clave aquí. Utiliza un imán envuelto en un paño fino para comprobar que el coche aún conserva las puertas, pasos de rueda y capó de aluminio –el imán no se pegará–. Si ha tenido un accidente, es probable que se hayan cambiado por repuestos de metal –el capó original ya no está disponible y el resto de paneles de aluminio son caros–.
Algunos coches se oxidan por el techo. Comprueba también que las aletas delanteras no tengan burbujas en su zona inferior o en los bordes. El revestimiento de los pasos de rueda debería desmontarse periódicamente para limpiar el interior de las aletas, ya que es una zona que recoge agua y suciedad, facilitando la corrosión.
Verifica que la tercera luz de freno funciona y busca abombamientos en el spoiler que lo rodea. En el maletero, levanta el tapizado y cerciórate de que el hueco de la batería no tenga óxido. Además, comprueba el estado del escape y si es original – el silencioso de VW son más de 700 euros–.
Revisa también que los faros de xenón se encienden a la vez y tengan una intensidad similar –son caros de cambiar–. Comprueba que los cristales sean de la marca Sekurit –salvo el de la luneta trasera, la misma que la del Lupo normal–: y asegúrate de que el cierre centralizado actúe en todas las cerraduras y que ambos elevalunas funcionen.