RANGE ROVER SVR
Si 550 CV no eran suficientes, la renovación de la gama del Range Rover Sport ha traído consigo un aumento de potencia de 25 CV para la versión más extrema de la gama.
La irrupción del cayenne, allá por 2002, provocó una especie de reacción en cadena por parte del resto de fabricantes premium. Su objetivo era –y sigue siendo– desbancar al modelo de Stuttgart como el SuV más rápido. algunos lo han conseguido –al menos, sobre el papel–, aunque ninguno le ha plantado cara con la excelencia del range rover Sport.
porque mientras otros han de renunciar a su idiosincrasia para convertirse en dragster de 2.300 kg, el SVr ha sabido mantener unas más que decentes cualidades fuera del asfalto, pese a prescindir de la reductora; al menos así era en la anterior versión, con 550 cV.
Más allá del aumento de potencia –25 cV más–, que permite una leve mejora de las prestaciones – 0,2 segundos menos en pasar de 0 a 100 km/ h, dejando la cifra en 4,5 segundos–, los cambios no son excesivos. en el exterior, hay un nuevo capó que incorpora unas rejillas de ventilación y está fabricado en ligera y resistente fibra de carbono. Opcionalmente, puede pedirse que la parte central esté sin pintar, dejando este noble material al descubierto – también las carcasas de los retrovisores o el embellecedor del portón trasero–; todo, a cambio de 9.541 euros. en cuanto a las llantas, mantiene de serie unas de 21”, proponiendo como opción unas de 22” con dos colores a elegir –negro mate o gris pulido–.
en lo que respecta al apartado dinámico, land rover apunta a que ha introducido una serie de modificaciones tanto en el chasis como en la amortiguación, con el objetivo de hacer más ágil el paso por curva y reducir los movimientos de la carrocería en aceleraciones y decelera- ciones bruscas. asimismo, el equipo de frenos se ha mejorado, si bien no precisan en qué sentido – el diámetro de los discos es idéntico–.
Más importantes son, si cabe, las modificaciones en el habitáculo, que recibe la doble pantalla central estrenada en el Velar. los asientos delanteros deportivos ahorran 30 kilogramos respecto a los del resto de la gama y, además, pueden contar con ventilación incorporada.