Motor
La elección o el diseño de este componente también es relativamente libre –la potencia que puede consumir está limitada por reglamento a un máximo de 250 kW– y está en manos de los equipos. Aunque en temporadas pasadas ha habido bastantes diferencias en este apartado –con motores longitudinales, transversales, e incluso dobles motores de flujo axial; un tipo de motor eléctrico con forma de disco–, todos los coches que se han presentado emplean un único motor, de imanes permanentes, con un régimen de giro altísimo –35.000 rpm– y un peso de menos de 25 kilos–.