LA úLTIMA
TODOS LOS DíAS, después de nadar y hacer mis obligados ejercicios de mantenimiento, suelo abrir mi correo electrónico para leer las notificaciones que me llegan. La verdad es que supone un momento mágico y esperado, pues entre todas siempre hay alguna que me alegra el día... aunque, de vez en cuando, también hay alguna que no desearías leer nunca.
En el caso que os voy a contar, el remitente se presentó como Julio López, piloto valenciano de motos de agua. Muy educado y respetuoso empezaba diciendo que le perdonara el atrevimiento pero que su amigo Rafael Morcillo, que monta también en moto de agua con su grupo, había tenido un accidente de moto en una rotonda con la mala fortuna de golpear con su espalda en el bordillo y esto le había provocado pérdida de sensibilidad, y que tras una operación de ocho horas parecía que se iba a quedar en una silla de ruedas.
¡UFFF! Qué malísima noticia. Desde que yo me rompí la espalda he recibido muchas llamadas o correos para contarme historias de personas que han tenido un accidente y el resultado ha sido, en muchos casos, el mismo que el mío. Os aseguro que no me acostumbro a recibir estas noticias, siempre me vienen a la cabeza los recuerdos de cuando me pasó a mí: del quirófano, los dolores, el daño a los amigos y familia… whatelse?
Julio me pedía si le podía hacer un vídeo para darle ánimo, que se lo había pedido a Fonsi Nieto y que se lo había enviado y le había hecho muchísima ilusión. Nada más leerlo, me puse manos a la obra y en cero coma lo tenía y, por mi cuenta, les pedí a Colate y a Manolo Quijano que también le enviaran un vídeo motivador porque son muy moteros y me hacía ilusión. ¡Vamos chicos, hay que motivar al amigo de Julio! No les faltó tiempo para hacerlo y enviarlo al momento. ¡Qué grandes sois!
Obviamente, seguí en contacto con Julio y me fue contando sobre la evolución de Rafael. Me comentaba que estaba muy motivado y que recibía entre 50 y 60 visitas diarias. ¡Woauuu, como una estrella de cine!
Seguimos hablando y un día me envió unas fotos de Rafa montando en moto de agua poco antes de tener el accidente. Entonces, yo escribí a Rafa y le dije; tú vas a volver a montar en moto de agua y, además, lo vamos hacer juntos, ¿qué te parece? Rafa respondió que por supuesto y que, además, se vendría a Miami para ello.
Los meses siguieron pasando y seguí en contacto tanto con Rafael como con Julio. Un buen día, Rafa me dijo que se había comprado un todoterreno y que le iba a poner un enganche de remolque para la moto de agua. ¡Toma ya! Al poco me mandó un vídeo de él montando en su moto de agua otra vez con una dedicatoria que, como os podéis imaginar, me hizo muchísima ilusión. Verle navegando con la sonrisa de la felicidad en su cara, me llenó de alegría.
Para culminar esta historia, me envió unas fotos donde me decía que estaba preparando la moto para irse a competir en la primera carrera del Campeonato de España de motos de agua. Claro, cómo no, tiene a su excepcional amigo Julio y un equipo de los buenos, como los que yo he tenido siempre y ha hecho lo mejor que podía hacer, ¡competir!
Todo sea dicho, llamé a mi buen amigo
Carlos Vela, que ha sido parte fundamental de mi carrera deportiva y que sigue inmerso en las carreras, ahora con su hijo Carletes, un muchacho excepcional que tiene escamas en vez de piel de las horas que dedica al jetski. Le conté toda la historia y le dije: Carlos hay que ayudar a Rafa para hacerle un asiento especial porque si no, va a ir muy descolocado, como yo iba al principio. ¡JAJAJA!
Sin lugar a dudas, empezar a competir en moto de agua fue lo mejor que pude haber hecho. La sensación de volver a ponerte el casco y competir otra vez fue increíble. Estoy muy orgulloso de haber competido tantos años y haber conocido a excepcionales mecánicos y grandísimos pilotos con los que he luchado de tú a tú. Desde estas líneas, también quiero enviar mi gratitud y cariño a Arturo Almendros y a su padre por ayudarme a conseguirlo cuando pocos federativos de la Española entonces lo hacían.
Que sepáis que tengo licencia en vigor…
¡ahí lo dejo!
Por cierto, Rafa me envió un mensaje muy emotivo y aquí os lo dejo.
¡¡¡ Toñe jo, amigo !!! Espero que estés muy bien y que todo vaya de categoría. Te cuento… este fin de semana tenemos campeonato en Cádizy me he hecho unos vinilos para la moto entre los cuales hay uno que me gustaría poner si me das tu aprobación. Tú en las entrevistas hablas de que gracias a Te o pudiste tirar hacia adelante y que siempre lleva rías su nombre entumo to… pues, bueno, yo gracias a ti he tirado para adelante en estoy me gustaría también hacer como tú. Te envío una foto de la pegatina que he hecho y si te parece bien me la pongo y, sino, no pasa nada. Ya me dices algo, amigo .¡ Una brazo!
La pegatina que colocó en la moto pone: TOÑEJO RODRIGUEZ RR23
“La silla se lleva en el culo y no en la cabeza”.