Excelencias Turísticas del caribe y las Américas

Sencillame­nte, mucho donde elegir

- TEXTO: ENRIQUE MOLINA FOTOS: ARCHIVO EXCELENCIA­S

PEQUEÑO PAÍS POSEEDOR DE LA MAYOR RIQUEZA BIOLÓGICA MUNDIAL POR UNIDAD DE SUPERFICIE, ADEMÁS DE 11 VOLCANES ACTIVOS, 1 200 KM DE COSTA EN EL PACÍFICO, MÁS 900 KM EN EL CARIBE, SELVAS, MANGLARES, ARRECIFES, BOSQUES NUBLADOS, CAMPOS DE LAVA, MONTAÑAS...

Arribé a una playa solitaria de Costa Rica orlada de cocoteros donde un pescador lanzaba su caña, le enfoqué con mi cámara y pareció adivinar al viajero en busca del paraíso perdido; me saludó con una sonrisa preguntánd­ome «¿Pura vida?». «Pura vida», le respondí antes de entablar una amigable conversaci­ón sobre aquella playa de Dominical, en la costa del Pacífico.

Si visitas Costa Rica ya sabes que este es el saludo «tico»: «¡Pura vida!». Bonito saludo el de los habitantes de este pequeño país poseedor de la mayor riqueza biológica mundial por unidad de superficie, pues Costa Rica ha declarado de especial protección un tercio de su territorio. Sencillame­nte mucho donde elegir: 11 volcanes activos, 1 200 km de costa en el Pacífico, más 900 km en el

Caribe, selvas, manglares, arrecifes, bosques nublados, campos de lava, montañas, etc. Y gracias a su tamaño podemos ver una muestra de todo en cada visita. ¡Ah!, ellos se dicen a sí mismos «ticos» por su hábito de hablar en diminutivo: «¡Fui un momentico!». «Estuve un ratico…».

EL VALLE CENTRAL

La capital, San José, es la entrada principal al país para los vuelos internacio­nales. Las guías turísticas suelen poner que no tiene atractivos, tal vez por no contar con una gran arquitectu­ra, pero hay lugares como el Museo del Oro con sus 2 000 magníficas piezas precolombi­nas que vale la pena visitar. Cercano al Museo se encuentra el Teatro Nacional, la joya arquitectó­nica de la nación, terminado en 1897 a semejanza de la Ópera de París según refieren orgullosos.

Buscando esa conjunción de cultura y naturaleza salgo hacia Cartago, capital del país hasta 1823. Poco queda allí de arquitectu­ra colonial porque los frecuentes movimiento­s sísmicos han causado estragos, siendo el mejor exponente las ruinas de la Parroquia Santiago Apóstol, construida en la época colonial e inconclusa a causa de los frecuentes sismos.

A las afueras me sorprende la estructura bizantina, realizada en maderas preciosas, de la Basílica de Nuestra

Señora de los Ángeles, Patrona de Costa Rica, cuya festividad, el 2 de agosto, genera grandes oleadas de peregrinos, que llegan de todo el país remontando la carretera Interameri­cana, trazada a lo largo de la Cordillera Central a más de 2 000 m.s.n.m.

Prosigo hacia el Valle de Orosi, famoso por sus bellos paisajes de suaves montañas, donde se localizan los primeros asentamien­tos españoles. Destaca la iglesia de San José por su bello altar de madera tallada; fue edificada por misioneros franciscan­os en 1743, siendo la única construcci­ón colonial del país que se mantiene en buen estado.

Orosi es también conocido por sus aguas termales recomendad­as para aliviar toda clase de dolores y por las bondades de un clima de eterna primavera.

EL TELEFÉRICO DEL BOSQUE

Viajo hacia el norte de San José en busca de la selva costarrice­nse. En solo 30 min la carretera se interna por el Parque Nacional Braulio Carrillo caracteriz­ado por una densa selva que las laderas de las montañas hacen más imponente, naturaleza virgen por donde hubo que abrir irremediab­lemente esta brecha para comunicar la capital con la zona del Caribe, aunque se cuidó mucho de afectar lo menos posible al medioambie­nte.

He llegado a un lugar que me ofrece la posibilida­d de adentrarme en teleférico sobre la selva. Saboreo una experienci­a sorprenden­te deslizándo­me entre los diferentes niveles: desde la oscuridad selvática del suelo hasta elevarme entre copas de árboles gigantesco­s que son hogar de inmensa variedad de atractivas aves y plantas como bromelias, orquídeas, lianas, etc.

El teleférico del bosque fue construido con ayuda de un helicópter­o de la fuerza sandinista (pues Costa Rica no tiene ejército) el cual transportó las enormes torres de acero hasta colocarlas en el punto exacto para evitar abrir brechas minimizand­o el impacto ambiental.

Teleférico suena a esquí, pero su adaptación al caluroso entorno de la selva me pareció una idea original, idónea para acercarse de manera fácil a este respirader­o del mundo donde se concentran valiosas especies de plantas para la cura de muchas enfermedad­es

Costa Rica es un respirader­o del mundo donde se concentran valiosas especies de plantas para la cura de muchas enfermedad­es, así como animales que el visitante puede ver sin dificultad

Así es Costa Rica diversa, verde, exuberante y natural, un paraíso para dedicarle días sin prisa hasta llenarse el alma con el espíritu tico de «¡Pura vida!»

(el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos ha identifica­do por encima de 1 400 plantas con principios medicinale­s), así como animales que el visitante puede ver sin dificultad como tucanes, pájaros carpintero­s, perezosos, guacamayos y muchos otros.

Aquí es también el mejor sitio para realizar un circuito de canopy (tirolina). Casco, arnés, seguir las indicacion­es de los guías… ¡y a volar deslizándo­se a lo largo de siete tramos cableados entre plataforma­s de árboles gigantesco­s!

Por unos instantes puedes sentirte Tarzán (a lo mejor Chita), hombre-pájaro o mariposa gigante; en todo caso observamos la selva desde otro punto de vista disfrutand­o sin dañarla.

En el mismo complejo se encuentran instalacio­nes interesant­ísimas: mariposari­o, ranario y serpentari­o. Las dos primeras se ubican en un tramo de selva acotado por una inmensa maya que permite observar las fases de crianza de las más bellas mariposas. Veo con asombro salir las morpho de su capullo, esa mariposa de alas azul metálico tan preciosa pero imposible de fotografia­r en vuelo. Entre las exóticas flores, ranas de intensos colores saltan por donde menos lo esperas. En tanto, las serpientes quedan resguardad­as dentro de elementos de seguridad pues las hay muy venenosas.

En la selva prácticame­nte todos los días puede sorprender­nos un aguacero, sobre todo en temporada de lluvias que va de mayo a noviembre. El modelo climático suele ser mañanas luminosas y tardes húmedas.

VOLCANES Y CASCADAS

Costa Rica puede presumir de mostrar toda una erupción volcánica desde un mirador turístico: El volcán Poas se erige como protagonis­ta del espectácul­o.

Madrugo para llegar temprano a la cima (2 708 m) antes de que las nubes tapen su cráter de casi 2 km y 300 m de profundida­d por donde emanan numerosas fumarolas.

Desde San José se llega fácil por una carretera llena de curvas y magníficas vistas sobre campos de café, cuyas hojas de color verde oscuro contrastan con el azul de las montañas lejanas.

La vista del cráter activo resulta imponente. Un leve olor a azufre impregna la cumbre. Delante se presenta el escenario ideal donde cualquiera puede lucirse como intrépido viajero y gran fotógrafo de la naturaleza más desafiante.

Veremos cómo por la izquierda se precipita una gran lengua de lava solidifica­da en la última erupción de 1953, nada crece sobre ella. Por el lado opuesto seguimos el sendero cubierto por árboles enanos de troncos retorcidos hasta el cráter extinguido de laguna Botos, lleno de agua pluvial de color verde esmeralda.

Del agua quieta de la laguna paso al agua en caída libre de la Catarata de La Paz, enclavada en un entorno de gran belleza al lado de la carretera que salva el río mediante un antiguo puente de madera y hierro, muy bien integrado al paisaje.

Al norte del país, el volcán Arenal -muy activoescu­pe lava ininterrum­pidamente desde 1968. El Arenal se observa mejor por la noche, cuando su lava brilla y las explosione­s provocan efectos espectacul­ares en la oscuridad.

DOMINICAL

Elegí mi próximo destino por la intuición que me provoca un nombre que sabe a día de descanso: Playa Dominical. Salgo por la Interameri­cana, carretera que si pensamos que conecta Alaska con la Patagonia es mucha carretera.

Debe ser la más larga del mundo y un reportaje de su recorrido total sería el viaje por Excelencia, aunque mejor lo dejo para otro día cuando baje la gasolina, de momento me planteo ir de San José hasta Panamá.

Dominical es una larga playa con palmeras y buen ambiente; las tablas de surf forman parte del paisaje pues se ha convertido en paraíso de los surfistas por su fuerte oleaje. Nada de grandes bloques de hoteles, estos son pequeños y bien integrados en la naturaleza; hay restaurant­es típicos y camping. Encuentro

Golfito es la puerta de entrada hacia la península de Osa, que conserva la zona de selva más prístina que queda en la actualidad en América Central y donde se encuentra el Parque Nacional Corcovado, tal vez el lugar biológicam­ente más intenso de la Tierra

una mezcla de aislamient­o y servicios básicos, incluido local de Internet. Vamos, que es un lugar para perderse sin riesgos.

Me alojo en Cuna del Ángel; hotel-boutique, sofisticad­o y lindo. Un día me voy en una pequeña embarcació­n a observar ballenas jorobadas, pues agosto es época de cría en la que acuden cerca de estas costas cetáceos de hasta 15 m, fácil de verlas pero difícil de fotografia­rlas bien.

GOLFITO

Más al sur llego a Golfito, asentado junto a una ensenada dentro de un golfo, y única ciudad del país que se encuentra en medio de un área protegida llamada Refugio Nacional de Fauna Silvestre. Golfito es la puerta de entrada hacia la península de Osa, que conserva la zona de selva más prístina que queda en la actualidad en América Central y donde se encuentra el Parque Nacional Corcovado, tal vez el lugar biológicam­ente más intenso de la Tierra.

Se me ocurre adentrarme en la península con vehículo, he visto en el mapa un pueblo llamado Rincón y como me sugiere algo bonito voy para allí. La carretera parece un auténtico queso gruyere, los baches se cuentan a cientos aunque no me quejo porque el aislamient­o salvaguard­a su estado salvaje. Disfruto una playa de ensueño toda para mí, tengo mi coche cerca pero por unos instantes me siento Robinson Crusoe rodeado de manglares a un lado y el bosque de cocoteros a otra.

Así es Costa Rica: diversa, verde, exuberante y natural, un paraíso para dedicarle días sin prisa hasta llenarse el alma con el espíritu tico de «¡Pura vida!».

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? Parroquia Santiago Apóstol.
Parroquia Santiago Apóstol.
 ??  ?? Valle de Orosi.
Valle de Orosi.
 ??  ?? Catarata de La Paz.
Catarata de La Paz.
 ??  ?? Parque Nacional Braulio Carrillo.
Parque Nacional Braulio Carrillo.
 ??  ?? Volcán Poas.
Volcán Poas.
 ??  ?? Playa Dominical.
Playa Dominical.
 ??  ?? Golfito.
Golfito.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain