¿Es oportuno el impuesto al plástico?
Las industrias lácteas se enfrentan a un incremento del precio de la leche en origen que alcanzará el 70% interanual a final de año por el aumento de los costes de producción y la caída de la oferta por el calor que ha hecho tras el verano. Este impacto se suma al alza de otras materias primas, el transporte o la energía, lo que ha provocado ya un incremento del 28% en el precio de la leche en los lineales de los supermercados, una cifra que seguirá creciendo y que, pese a ello, será insuficiente para detener la caída de márgenes que sufre el sector y, en general, todas las industrias de alimentación y bebidas. Y lo peor puede estar por llegar. Además de la fuerte subida salarial a la que van a tener que hacer frente a partir de enero las empresas debido a la inflación, las industrias de alimentación afrontan la entrada en vigor a partir del 1 de enero del impuesto al plástico, una medida que supondrá un sobrecoste de 690 millones de euros para el conjunto de los productores de alimentación y bebidas, según cálculos de Fiab. Nadie en el sector duda de la importancia de reducir el consumo de plástico y elevar, en paralelo, el uso de plástico reciclado. Como tampoco nadie duda de la importancia de impulsar políticas sostenibles. Lo que se plantea al Gobierno, y las industrias lácteas trasladaron ayer al ministro Luis Planas, es si es el momento oportuno para introducir más costes a unas empresas que ya viven con el agua al cuello o hacer como Italia y retrasar la entrada en vigor de este impuesto.