Schroders critica a los asesores de fondos de pensiones
El CEO de la gestora, Peter Harrison, está “muy en desacuerdo” con la decisión de los reguladores de no imponer normas estrictas.
La crisis del mercado de pensiones británico ha puesto de manifiesto el “conflicto de intereses” existente con los asesores de inversiones, que deberían ser regulados, según afirma el consejero delegado de Schroders, Peter Harrison.
“Definitivamente hay algunos conflictos bastante importantes aún por abordar en la industria... en lo que respecta a ser tanto el asesor de las gestoras de fondos como el gestor de los propios activos a través de sus órdenes de ejecución”, explica Harrison, responsable de la gestora de activos del FTSE 100
Los gestores de los fondos de pensiones recurren a consultores de inversiones, como Willis Towers Watson, Mercer, Redington y Cardano, para que les asesoren sobre estrategias de inversión. Algunos de ellos también ofrecen una gestión fiduciaria, que implica que las gestoras deleguen algunas decisiones de inversión en los asesores, además de proporcionar asesoramiento en materia de inversiones.
Los asesores han desempeñado un papel activo a la hora de animar a la industria británica de los fondos de pensiones de prestación definida, que alcanza un valor de 1,5 billones de libras (1,7 billones de euros), a adoptar estrategias de inversión basadas en obligaciones (LDI por sus siglas en inglés) que utilizan derivados para aumentar su exposición a los bonos y cubrir su exposición a las variaciones de los tipos de interés y la inflación. Estas estrategias fueron el epicentro de la tormenta que se instaló en los bonos públicos de Reino Unido tras el desastroso presupuesto del Gobierno de Liz Truss, a finales de septiembre.
Aunque los asesores han sido objeto de un mayor escrutinio –como las críticas en un informe de 2018 de la Autoridad de Competencia y Mercados–, Harrison afirma estar “muy en desacuerdo” con la decisión del regulador de no imponer normas más estrictas a los asesores.
Sus palabras se hacen eco de las del consejero delegado
Harrison cree que las gestoras de fondos de pensiones podrían plantear cuestiones legales
de la Autoridad de Conducta Financiera, Nikhil Rathi, quien sugirió que unas normas más estrictas para los asesores de los fondos de pensiones garantizarían una mayor atención a la gestión de los riesgos.
En su intervención del lunes ante el comité selecto del Tesoro, Rathi declaró: “Quizá si sus asesores hubieran sido más sensatos a la hora de afrontar niveles de estrés como éste, parte de ese riesgo se habría gestionado de forma más eficaz”.
Harrison también advierte de que las gestoras de fondos podrían plantear cuestiones legales como consecuencia de los problemas experimentados por los fondos LDI apalancados en el punto álgido de la crisis del mercado de bonos.
Los fondos de pensiones que vieron cómo los proveedores de LDI cerraban sus posiciones por no poder hacer frente a las garantías “van a estar realmente molestos y creo que interpondrán un recurso”, añade.