Johnson, cada vez más acorralado ante el aluvión de dimisiones
EL PRIMER MINISTRO RECHAZA DIMITIR/ El primer ministro “luchará” hasta el final para seguir en el poder. Los críticos empiezan los trámites para forzar su cese mediante una segunda cuestión de confianza.
El primer ministro británico, Boris Johnson, resiste con respiración asistida a la peor crisis política que vive desde 2019, cuando asumió el cargo. Nadie sabe a ciencia cierta cuánto aguantará: los críticos de su partido ya han empezado los trámites para forzar su cese mediante una cuestión de confianza interna, mientras que él mismo, anoche, aseguró a sus ministros que va a “luchar” hasta en el final y que su empeño es seguir en el poder, cueste lo que cueste. Ante las peticiones de dimisión, se mostró “absolutamente desafiante”, según fuentes gubernamentales citadas por Sky News.
La renuncia de una cuarentena de altos cargos y asesores en 24 horas alegando pérdida de confianza ha puesto al mandatario británico en una situación más que difícil. Ayer por la tarde, en Downing Street, Johnson se reunió con varios ministros, y algunos de ellos le plantearon abiertamente que se vaya. Entre ellos, sobresalió el titular de Interior, Priti Patel, que certificó que una “abrumadora” mayoría de diputados del Partido Conservador creen que la situación ya no da más de sí. Por su parte, el responsable de Transporte, Grant Shapps, aseguró que Johnson tiene muy pocas opciones de sobrevivir a una segunda cuestión de confianza interna, tras ganar por la mínima una votación de este tipo hace un mes. Por esta razón, le emplazó a fijar un calendario para planificar su salida, informa Efe.
Horas antes, el primer ministro dejó claro que su afán es continuar y para evidenciarlo, puso una misión muy clara al nuevo ministro de Economía: rebajar los impuestos. Se trata de Nadhim Zahawi (Bagdad, 1967), un valor en alza del Partido Conservador. Lideró el programa de vacunas contra el Covid-19 y su gestión y sus pedagógicas ruedas de prensa le dieron mucha popularidad. Por este motivo, Johnson decidió ascenderle y en 2021 le designó titular de Educación. Ahora, asume el Ministerio de Economía, lo que le sitúa automáticamente como uno de los favoritos para suceder a Johnson, si es que el relevo se acaba consumando.
En las quinielas, aparecen también otros nombres. Algunos forman parte del Ejecutivo, como Lizz Truss –titular de Exteriores– y Ben Wallace (Defensa). Otros están totalmente alejados del primer ministro, como Jeremy Hunt –que en 2019 compitió en las primarias en las que Johnson resultó elegido– o los primeros protagonistas de la última ola de dimisiones. Se trata del extitular de Economía, Rishi Sunak, y el de Sanidad, Sajid
Javid, que renunciaron el martes.
Tensión en el Parlamento
En este contexto, el primer ministro protagonizó ayer una enrarecida sesión de control en el Parlamento de Westminster. Especialmente duro fue el ataque de Javid al concluir que el problema “empieza arriba del todo y eso no va a cambiar”. Volvió a pedir, como ya hizo ayer al presentar su dimisión, la renuncia de Johnson e instó al resto de miembros del Gobierno a actuar en conciencia. En un clima de alta tensión con acusaciones cruzadas y reproches, Johnson subrayó que su “deber” es “seguir adelante” y que continuará “haciendo el trabajo” pese al pulso que le han lanzado los críticos.
En este contexto, Zahawi avanzó ayer que su principal objetivo será poner en marcha la rebaja de impuestos más importante “en 10 años”, en palabras d Johnson. Será el principal encargo que tendrá el primer ministro de Economía nacido fuera de las Islas Británicas, ya que es originario de Irak. Llega al puesto en un contexto económico adverso, muy marcado por el alza de la inflación, que en mayo se situó en el 9,1%, el mayor incremento en 25 años.
En sus primeras entrevistas, Zahawi dejó claro que se alejará de la subida de impuestos anunciada por su predecesor. Afecta a Sociedades, un tributo que lleva congelado desde 1974. Si ahora es del 19%, en el próximo año pasará al 25%. El compromiso del ministro es revertir este incremento o, al menos, suavizarlo.
“Lo miraré todo, no hay nada fuera de la mesa, quiero que Reino Unido sea uno de los países más competitivos del mundo para los inversores”, señaló Zahawi. “Los consejos de administración de todo el mundo, cuando toman decisiones de inversión, son a largo plazo, y el único impuesto a nivel global que pueden comparar es el de Sociedades”, agregó.
También explicó que quiere revisar a la baja los impuestos a 30 millones de ciudadanos británicos, manteniendo la disciplina fiscal. También abogó por la prudencia a la hora de trasladar la inflación a los salarios públicos.
Johnson está en el epicentro de las críticas por cómo ha gestionado un escándalo que afecta al exnúmero dos de los conservadores en el Parlamento, Chris Pincher. Está acusado de acoso y en el pasado ya tuvo que lidiar con hechos similares que, según los críticos, Johnson conocía. Por ello, ya han empezado el trámite para forzar una cuestión de confianza. En junio, superó por la mínima una votación de este tipo. En aquella ocasión, el detonante fueron sus fiestas en Downing Street durante el confinamiento.
Dejan el cargo una cuarentena de ministros, secretarios, asesores y cargos orgánicos
El nuevo titular de Economía se compromete a dejar sin efectos el alza de Sociedades