Santander ve una caída “muy importante” del riesgo legal por Popular
El TJUE cerró en mayo la puerta a que los accionistas de Popular reclamen a Santander.
Santander considera aminorados los riesgos legales vinculados a la adquisición de Popular, tras la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que hace tres meses cerró la puerta a que los antiguos accionistas de Popular que acudieron a la ampliación de 2016 reclamen una compensación a Santander.
En torno a 300.000 accionistas del extinto Popular perdieron hace cinco años toda su inversión para contribuir a la absorción de las pérdidas del banco.
“El 5 de mayo, el TJUE ha resuelto que [la legislación europea] se opone a que, con posterioridad a la amortización de las acciones de una entidad en resolución, los accionistas que hayan adquirido acciones en una oferta pública ejerciten, contra esa entidad o la que la suceda, una acción de responsabilidad por la información contenida en el folleto o una acción de nulidad del contrato de suscripción”, indican las cuentas semestrales de Santander.
“La sentencia supone una disminución muy importante del riesgo asociado a estas reclamaciones”, dice el banco.
Santander también recoge en el informe que el juez de la
Santander reservó 680 millones en 2017 para cubrir las compensaciones a clientes de Popular
causa penal abierta contra exgestores de Popular por presunta estafa acaba de rechazar la petición del banco de ser excluido del pago de una posible responsabilidad civil pese a la sentencia del TJUE. “Esta decisión es susceptible de apelación”, señala la entidad.
Santander reservó en 2017, cuando adquirió Popular por un euro, 680 millones para compensaciones a inversores. Del total, 535 millones se han aplicado a la “acción comercial de fidelización”, el bono que ofreció a los afectados a cambio de renunciar a las acciones legales.
Los costes por litigios son un frente aún abierto de la operación y determinarán, en parte, la rentabilidad que Santander logre con la compra.
Transcurridos cinco años desde la adquisición, no existe un balance del retorno que Santander ha obtenido de los 7.000 millones que inyectó en Popular en 2017 y en qué medida ha conseguido aproximarse a la rentabilidad del 14% que calculó en origen.