Heineken tantea subidas de precios
La fabricación de cerveza es un negocio que requiere mucha energía. Los costes de Heineken están creciendo, pero sus beneficios de la primera mitad del año muestran que el segundo fabricante de cerveza del mundo apenas ha encontrado resistencia para transferir los costes a los consumidores.
Las subidas de precios rondan el 9%, lo que contribuye a un incremento del 15,3% . En esa medida también influyó la reapertura de bares y la tendencia de los consumidores a elegir bebidas más caras.
Esos factores deberían ayudar a que se mantenga el margen del beneficio operativo este año. Pero no sería razonable esperar que los beneficios sigan aumentando tan rápidamente como los ingresos, inflados por la subida de precios. De ahí que el nuevo objetivo de Heineken sea el crecimiento de su beneficio operativo.
Una meta difícil, ante la preocupación por los precios y la disponibilidad de gas natural. Europa representa un tercio de los beneficios operativos de Heineken. La compañía ha reducido su dependencia de los combustibles fósiles . Pero esto podría perjudicar a sus proveedores de envases y a sus consumidores.
Su programa de recorte de costes será una contribución positiva, cuyo objetivo es ahorrar 1.700 millones de euros con la base de 2019 a finales de este año. El mayor margen de ahorro es una razón por la que sus acciones cotizan sobre un PER de 19, cinco veces más que su competidor AB InBev. Otra es el potencial de Heineken para incrementar su cuota en los mercados emergentes.
El gasto en márketing se ha recuperado a niveles anteriores a la pandemia, impulsando la demanda de sus productos más caros, como la marca Heineken. La cartera tiene una proporción más alta –un 40%- de marcas premium que la media del sector. La empresa apuesta por seguir con la tendencia premium, aunque suban los precios y la economía se debilite.