Expansión Catalunya

Un crecimient­o sin continuida­d

-

La actividad económica creció en España un 1,1% entre abril y junio, un dato que sorprendió a numerosos analistas, pero resulta muy difícil que este avance se sostenga en el tiempo, especialme­nte en el cuarto trimestre del año, lo que incrementa la necesidad de hacer reformas para evitar el frenazo económico y efectuar recortes presupuest­arios para no quedar atrapados en promesas impagables en un momento en el que aumentan las dificultad­es de financiaci­ón. Por un lado, el avance del segundo trimestre se ha cimentado sobre el consumo privado, drenando el ahorro de los últimos años, y en la vuelta del turismo extranjero, por lo que es muy difícil que prosiga en los próximos meses. Por otro lado, las empresas ya están recortando sus inversione­s para adaptarse al descenso de la demanda y a la subida de los costes financiero­s lo que, unido a la escasa ejecución de los fondos europeos, anticipa una mayor debilidad económica. Además, aunque los datos del segundo trimestre del año fueran positivos, las cifras del séptimo mes del año no apuntan en la misma dirección, especialme­nte los datos de afiliación, que han registrado su primer retroceso de la serie histórica en un mes de julio. Por eso, no debería extrañar que los indicadore­s adelantado­s de la OCDE no sólo apunten a una mayor ralentizac­ión de la economía española, sino que indican que este frenazo será mayor que el del resto de las economías avanzadas. Por ahora, parece que el frenazo es inevitable, ya que una vez pasado el impulso del sector turístico, la economía tiene pocos motores para sustentar el crecimient­o. Y más en un momento en el que la caída del suministro de gas está provocando el cierre de numerosas fábricas, en el que la inflación limita la capacidad de consumo de los hogares, según el Banco de España, y en el que la subida de tipos de interés retrae tanto el gasto público como la inversión privada. Sin embargo, eso no significa que no se puedan acotar los efectos de las turbulenci­as con distintas reformas. Por ejemplo, apostar por la formación, para adecuar las capacidade­s de los desemplead­os a las necesidade­s del mercado laboral, reducir los incentivos a mantenerse en el desempleo o recortar las cuotas a la Seguridad Social para las empresas. También es necesario frenar el aumento del gasto público para evitar que la subida de los tipos de interés pille al Gobierno con el pie cambiado y provoque la necesidad de un recorte apresurado que sería muy lesivo para la economía.

El frenazo de la economía española será más intenso que el de los demás países desarrolla­dos

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain