Tranquilidad en las OPV tecnológicas
El menor temor a una inflación galopante ha dado un empujón a las acciones estadounidenses. Los inversores en Bolsa tienen cada vez más esperanzas de que la Reserva Federal reduzca el ritmo de las subidas de los tipos de interés y reavive la demanda de riesgo. El S&P 500 ha subido un 13% desde su mínimo de junio. El índice Nasdaq Composite, que tiene una mayor proporción de valores tecnológicos, se anota un 17%. Pero no se espera un aumento correspondiente de las ofertas públicas de valores.
El año pasado se batió un récord de salidas a Bolsa en todo el mundo con la incorporación de más de 3.000 empresas a los mercados cotizados. Estados Unidos fue el mayor mercado, con un tercio del total. Sólo el fabricante de vehículos eléctricos Rivian recaudó cerca de 14.000 millones de dólares (14.000 millones de euros).
Este año, el mercado está seco. El segundo trimestre ha sido el más lento en cuanto a salidas a Bolsa en EEUU en más de una década. La falta de operaciones se traduce en un creciente cúmulo de empresas privadas respaldadas por el capital riesgo con un valor de 1.000 millones de dólares o más. Crunchbase cuenta 1.395, frente a las 1.000 de hace un año. La empresa de pagos Stripe y la plataforma de medios sociales Reddit son dos de los debuts esperados más grandes que siguen siendo privados.
Los inversores a largo plazo que buscan una salida y los empleados deseosos de canjear sus opciones pueden esperar sentados hasta 2023. Incluso después de su reciente subida, el Nasdaq sigue estando un 20% por debajo del máximo del año pasado. El mercado laboral puede estar fuerte, pero la Fed va a seguir centrándose en ralentizar la inflación. Los inversores en renta variable deberían mirar hacia los mercados de bonos. La rentabilidad del Tesoro estadounidense a 10 años, por encima del 3%, predice una serie de subidas de tipos en el futuro.