La Fed sube los tipos 0,75 puntos, hasta su nivel más alto desde 2008
CON EL PIE EN EL ACELERADOR/ El precio del dinero escala por encima del 3% y en el banco central no descartan que a fin de año supere el 4,25%. Los tipos permanecerán altos hasta controlar la inflación.
La Reserva Federal subió ayer 0,75 puntos porcentuales los tipos de interés. Así, mantiene su hoja de ruta y, aunque no levanta el pie del acelerador, ya que se trata de la tercera subida consecutiva en este nivel, tampoco lo pisa más a fondo, como temía gran parte de Wall Street desde la semana pasada, cuando se disparó el temor a una revisión al alza de un 1% tras publicarse el último dato de la inflación (en el 8,3%), que si bien se moderó, lo hizo por debajo de las expectativas del mercado. Así, los tipos en EEUU se sitúan en niveles de 2008, justo antes de estallar la crisis financiera.
Y todo apunta a que en noviembre se producirá una cuarta subida consecutiva de tres cuartos de punto. Al menos, eso es lo que se desprende de las previsiones que ayer también publicó la Fed y que suponen un endurecimiento de la política monetaria que se preveía antes del verano. Si bien entonces el banco central estadounidense confiaba en no tener que llegar a superar la barrera del 4%, ahora sus cálculos indican que el precio del dinero escalará hasta una horquilla situada entre el 4,25% y el 4,5%. Eso implica subir los tipos otros tres cuartos de punto en noviembre y medio punto en diciembre.
Para 2023, las previsiones han empeorado considerablemente. Solamente un tercio de los gobernadores considera que no será necesario seguir subiendo los tipos. Otro tercio cree que bastará con un alza adicional de un cuarto de punto a principios de año, y el resto apuesta por llevar la tasa a una banda entre el 4,75% y el 5%. La lectura positiva es que todos descartan superar esta barrera a lo largo del próximo ejercicio.
Esta sería la nueva hoja de ruta siempre y cuando se cumplan las previsiones de la institución, con una moderación confirmada de la inflación en 2023. La Fed mantiene su objetivo de llevarla hasta el 2%.
Los gobernadores consideran que “la inflación sigue siendo elevada, lo que refleja los desequilibrios de oferta y demanda relacionados con la pandemia, los precios más altos de los alimentos y la energía y las presiones de precios más amplias”.
Contención de precios
Ayer, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, aseguró que algunos precios ya están dando muestras de contención, pero que todavía existen muchas incertidumbres sobre la mesa, entre las que destaca la evolución del precio de la energía. Lo cierto es que, en general, “la inflación sigue disparada y eso es suficiente para mantener una política monetaria restrictiva, dura y permaneceremos ahí hasta que nos sintamos seguros de que la inflación está bajando”.
Por eso, advirtió que “durante algún tiempo” los tipos seguirán altos, lo que “dañará el crecimiento económico”, y es posible que se genere un mayor desempleo. Aunque la tasa de paro en EEUU se sitúa en el 3,7% y Powell ha calificado el mercado laboral como “robusto”, lo cierto es que en agosto el desempleo aumentó (dos décimas) por primera vez desde que empezó la recuperación de la pandemia.
Las palabras de Powell borraron el ligero avance de los mercados tras conocerse la subida de tipos de 75 puntos básicos que ya estaba descontada y confirmarse que la Fed no se había visto obligada a llegar a subir los cien puntos
Hoja de ruta
básicos que se temía.
¿Y las previsiones para 2024? Las posiciones de los gobernadores de la Fed no pueden ser más dispares.
Mientras que un tercio considera que será necesario mantener los tipos por encima del 4%, otro tercio cree que podrían plantearse rebajas y situar el precio del dinero en un máximo del 3,5% y un mínimo del 2,5% (esta sería la postura más optimista de todas). Es en este mismo soporte donde se sitúan los cálculos para 2025.
“Tenemos tanto las herramientas que necesitamos como la determinación que hará falta para restaurar la estabilidad de los precios”, insistió ayer Powell, a pesar de que es consciente del “daño que puede causar”.
En opinión de Bryan Whalen, codirector de inversiones de TCW, la Fed “ha reiterado su mensaje agresivo” y ha “eliminado cualquier esperanza de un mensaje más moderado”.
En cambio, algunas voces creen que la Fed no es suficientemente agresiva a la hora de endurecer la política monetaria y que se ha equivocado al no subir los tipos un 1% esta semana. Desde Neuberger Berman consideran que, para combatir la inflación, los tipos deberían situarse a finales de este año a partir del 4,5%. Eso implicaría dos alzas más de tres cuartos de punto en noviembre y diciembre. Coincide con la previsión de Raphael OlszynaMarzys, economista de J. Safra Sarasin Sustainable AM: “Hay una alta probabilidad de que tenga que actuar ‘a lo grande’ en noviembre”.
“Es posible que, al final, la Fed tenga que subir los tipos más de lo previsto este año para controlar la inflación. Y que tengamos que soportar una fuerte desaceleración del crecimiento para conseguirlo, según las nuevas proyecciones. El dolor puede no haber terminado todavía”, aseguró ayer Callie Cox, economista de eToro.
Para Powell, algunos precios ya dan muestras de contención, pero con mucha incertidumbre
El presidente de la Fed señala que los tipos permanecerán altos, lo que dañará el crecimiento
Todo apunta a que en noviembre se producirá la cuarta subida consecutiva de 75 puntos básicos