“Hay una pérdida de bienestar, lo único que podemos hacer es repartir el coste con un pacto de rentas”
La escalada de los precios a doble dígito registrada este año, y que amenaza con mantener una inflación elevada durante los próximos meses, se traduce en que “hay una pérdida de bienestar, sí o sí, y lo único que podemos hacer es repartir el coste con un pacto de rentas”, advirtió ayer el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos.“Una posibilidad es repartirlo dentro solo del sector privado entre trabajadores y empresarios, nosotros pensamos que sería un mensaje mucho más potente de desindexación de la economía en un momento de inflación elevada el hecho de que también cubriera al sector público, incluidas las pensiones”, expuso.“Se puede hacer compatible cubrir a los más vulnerables, porque sabemos que el episodio inflacionista está siendo particularmente dañino para los más vulnerables, con que las pensiones mínimas se indicen pero quizás no el resto”, ilustró, matizando que una cosa es el debate de si es conveniente asegurar la revalorización de las pensiones con el IPC a largo plazo y otro el de si es prudente hacerlo bajo la actual coyuntura de alta inflación, que ha pasado el verano creciendo a doble dígito sus mayores tasas en casi cuatro décadas.
El Banco de España considera que, de momento, el país está esquivando los temidos efectos de segunda ronda de la inflación, que se dan cuando el alza de salarios y márgenes empresariales retroalimenta y agrava la escalada de precios, provocando una espiral inflacionista.“Hasta el momento se ha producido un pacto de rentas implícito: la moderación salarial es evidente, la caída de poder adquisitivo de los salarios reales también es evidente, los márgenes empresariales se han comportado también de una manera moderada, con heterogeneidad, pero vemos señales de agotamiento de este pacto de rentas implícito”, como hace temer el hecho de que las cláusulas de salvaguardia de revisión salarial en convenio se hayan disparado del 17% al 25% de los acuerdos firmados este año y al 50% de cara a los que ya se van registrando para 2023, indicó como ejemplo. Ante esta situación, Hernández de Cos consideró “necesario que el pacto de rentas se haga explícito para evitar la espiral inflacionista”, implicando tanto a los agentes sociales como al Estado.