El Govern rebaja la previsión del PIB al 4,4% para este año
La Generalitat rebaja las previsiones de crecimiento del PIB catalán al 4,4% este año, lo que supone 0,5 puntos menos de lo previsto en abril, y hasta el 1,7% en 2023, lo que representa un recorte de 1,2 puntos sobre la estimación inicial. El Departament d’Economia corrigió ayer sus previones debido al impacto de la crisis energética y a unas “presiones inflacionistas más elevadas y persistentes de lo que se esperaba”, entre otros factores.
El Ejecutivo catalán se suma así a las correcciones a la baja que están llevando a cabo tanto el Gobierno español como las principales economías de su entorno, aunque prevé que el empleo seguirá resistiendo y pronostica que la tasa de paro en Catalunya se recortará hasta el 9,5% en 2022 y el 9,4% en 2023, las más bajas desde 2008. Este año se habrán generado unos 85.000 nuevos empleos y, en 2023, se podría crear otros 41.800 puestos de trabajo.
El diagnóstico que hace el departamento liderado por Natàlia Mas es que la economía catalana sufrió una “desaceleración de la actividad durante el tercer trimestre”, con un debilitamiento tanto de los indicadores de consumo como de los de actividad, en un contexto de aumento generalizado de los precios y de encarecimiento de los costes intermedios.
“El mercado de la energía constituye el principal riesgo de las perspectivas económicas a escala europea”, apunta Economia, que también alerta de la “pérdida de renta real de los agentes privados” y avisa de que la merma de confianza puede afectar a la recuperación de la demanda.
La corrección para el año que viene es de 1,2 puntos, hasta una tasa de crecimiento del 1,7%