Asnef hace ‘lobby’ para acabar con la libertad de crédito en España
Es de los pocos países en Europa que no obliga a ser una entidad regulada para dar préstamos.
España es un poderoso imán de atracción para numerosas fintech. La razón por la que muchas eligen nuestro país como uno de los primeros en aterrizar tiene que ver con que es de los pocos en Europa donde la actividad de crédito es libre. Es decir, no exige ni tener ficha bancaria, ni estar registrado ante el Banco de España bajo otro tipo de licencias, como la de entidad de dinero electrónico.
La supervisión de estas empresas recae en las Direcciones de Consumo de las comunidades autónomas, que es mucho más laxa que la que ejerce un supervisor financiero.
España, por tanto, es un oasis para las fintech que quieren esquivar la estricta supervisión bancaria.
Las financieras de consumo son las primeras interesadas en que esta situación acabe cuanto antes porque sienten que no compiten en una situación de igualdad. Las fintech no soportan ni sus elevados costes regulatorios, ni los mismos niveles de transparecencia. Tampoco el gravamen especial del 4,8% sobre sus ingresos que el Gobierno prepara para bancos, pero también para financieras de consumo.
Asnef, la patronal que las agrupa, está haciendo lobby ante la Dirección General del Tesoro para conseguir que la concesión de crédito deje de ser una actividad libre, según explican fuentes financieras. Y equipararse de esta forma a la situación que rige en países vecinos, como Francia, Portugal, Italia, Alemania y Polonia, que vigilan créditos entre 200 y 75.000 euros. La actividad también está regulada en Reino Unido.
El Tesoro se ha mostrado receptivo, pero exige que las financieras de consumo vayan de la mano en este tema con las dos grandes patronales bancarias, la AEB y la Ceca.
Asnef agrupa a una cincuentena de entidades. Entre ellas, gigantes como Financiera El Corte Inglés, participado al 51% por Santander y al 49% por el grupo de grandes almacenes;
De las más de 400 ‘fintech’ que operan en España, solo 49 está bajo supervisión financiera
El resto de empresas están sujetas a las autoridades de Consumo de las CCAA, más laxas
La nueva directiva europea de consumo cambiará esta situación, pero no antes de 2025
Cetelem, la financiera de consumo de BNP Paribas; y CaixaBank Payments & Consumer.
En realidad, el marco normativo va a cambiar en España cuando entre en vigor la nueva directiva europea de banca al consumo. Pero para eso habrá que esperar hasta 2025, porque España tiene que trasponer la directiva a su legislación nacional.
Las financieras de consumo no están dispuestas a esperar tanto. Se calcula que de las cerca de 400 fintech que operan en España, solo 49 estarían bajo supervisión de un organismo oficial.
La nueva directiva al consumo sustituirá a la legislación que rige desde 2011 y regulará por primera vez la actividad del pago aplazado, que ha cobrado mucho auge en los dos últimos años. Según los últimos cálculos de McKinsey, un 3% de las compras por Internet se financia con esta fórmula en España.
Otras novedades
Tal y como está redactada, la nueva directiva exigirá a las financieras que otorguen un plazo de 24 horas al solicitante del préstamo para que estudie bien la operación antes de firmar el contrato. Asnef pelea para que esto no sea necesario en préstamos inferiores a 3.000 euros porque eso complicaría mucho las compra en campañas como el Black Friday. O, al menos, que el cliente pueda renunciar a ello.