Los contagios del Covid vuelven a cerrar China
A PESAR DE QUE HACE UNAS SEMANAS ANUNCIÓ UNA RELAJACIÓN DE LAS RESTRICCIONES, PEKÍN HA DECIDIDO MANTENER SU POLÍTICA DE CERO COVID DESPUÉS DE REGISTRARSE 28.000 NUEVOS CONTAGIOS, CON BROTES EN LA CAPITAL, EN GUANGZHOU Y EN CHONGQING, UNA CIUDAD AL SUROEST
Los casos de coronavirus en China se han disparado hasta alcanzar cifras récord, lo que ha obligado a las autoridades a volver a cerrar muchas zonas del país.
La segunda economía del mundo informó ayer de casi 28.000 nuevos contagios, con brotes en la capital china, el centro manufacturero meridional de Guangzhou y la metrópolis suroccidental de Chongqing, que siguen creciendo.
Las autoridades chinas han optado por cerrar la mayoría de los negocios no esenciales en el mayor distrito de la ciudad, Chaoyang, que tiene una población de 3,4 millones de habitantes. Además, restaurantes y otros lugares de ocio también han echado el cierre en gran parte de la ciudad, al tiempo que se ha pedido a los ciudadanos que trabajen desde casa.
"China está registrando un nivel récord de confinamientos", declaró Ting Lu, economista jefe de China en Nomura. "La situación es incluso peor que durante el confinamiento de Shanghai en primavera, porque afecta a muchas más ciudades", añadió.
En Nomura calculan que las restricciones de Covid han afectado a una quinta parte del producto interior bruto de China.
La política cero Covid de Shanghái ralentizó el crecimiento económico en el segundo trimestre, con un aumento de solo el 0,4% respecto al año anterior. Las restricciones por Covid han seguido golpeando a la economía, con un descenso de las ventas en el sector distribución del 0,5% en octubre y una producción industrial moderada.
El aumento de los contagios y las medidas cada vez más duras en todo el país se producen a pesar de las peticiones de Pekín, hace menos de dos semanas, de relajar los controles, lo que provocó un repunte de las acciones chinas en el mercado.
Desde entonces, el aumento del número de casos en China ha afectado a la confianza del mercado, ya que los operadores, que en su día pronosticaron un gran crecimiento económico tras la reapertura, están más preocupados por las perturbaciones derivadas de los confinamientos.
El índice CSI 300 de China, compuesto por acciones que cotizan en Shanghái y Shenzhen, se mantuvo plano el martes y ha caído más de un 2,5% desde que la semana pasada dominara el optimismo ante el anuncio de la relajación de las medidas. El índice de referencia ha perdido cerca de un 25% en lo que va de año.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Pekín afirmó que la capital se enfrentaba al entorno "más complejo y desafiante" desde el inicio de la pandemia, mientras que el máximo responsable de la ciudad, el secretario del Partido Comunista Yin Li, hizo hincapié el lunes en la política de cero Covid.
"Debemos ganar la guerra de prevención y control de la pandemia", sentenció Yin en declaraciones publicadas por los medios de comunicación estatales.
El aumento de los casos ha obligado a poner en cuarentena a un número creciente de edificios de apartamentos en Pekín, lo que ha puesto en una situación difícil a los funcionarios locales y a los residentes. Un funcionario de Shilipu, un distrito la capital, reconoció que él y nueve compañeros hacían lo que podían para atender a más de 7.000 hogares que se encuentran en cuarentena domiciliaria.
En Chongqing, otro punto con un alto nivel de contagios, la llegada el lunes de Sun Chunlan, una viceprimera ministra conocida por su draconiana estrategia de la lucha contra la pandemia, provocó compras compulsivas entre los residentes, preocupados por la posibilidad de que se produzca un duro confinamiento al estilo de Shanghai.
La ciudad está construyendo hospitales improvisados para proporcionar 43.063 camas adicionales además de las 17.000 existentes en tres hospitales.
Guangzhou, escenario de otro grave brote, ha seguido informando de un elevado número de casos, registrando el lunes 8.210 nuevos contagios. Aunque la ciudad ha intentado controlar la propagación del virus sin confinamientos, el lunes acabó confinando durante cinco días su mayor distrito, Baiyun, con una población de 3,8 millones.
La medida amplió el confinamiento del distrito sureño de Haizhu, que alberga muchas de las fábricas de ropa de la ciudad y que ya ha ampliado su propio cierre en varias ocasiones.
Las autoridades chinas han optado por cerrar la mayoría de los negocios no esenciales
Nomura calcula que las restricciones han afectado a una quinta parte del PIB del país