Carlos Torres, el banquero con una idea fija
PERFIL/ Carlos Torres ha sorprendido a todo el país y a Europa, donde las opas hostiles son poco frecuentes, especialmente en el sector bancario.
El presidente del tercer mayor banco español ha presentado una opa hostil en su segundo intento de hacerse con Sabadell, propietario de TSB, por 12.000 millones de euros.
Sabiendo que el consejo de administración de Banco Sabadell se reuniría al día siguiente para evaluar su oferta de 12.000 millones de euros por la cuarta entidad crediticia de España, el presidente del BBVA, Carlos Torres, hizo un último intento para hacerse con su codiciado objetivo.
En un correo electrónico enviado el domingo por la noche a su homólogo del Sabadell, Josep Oliu, defendió su segundo intento de fusión –ya lo intentó sin éxito en 2020–. El banquero ha calificado la operación como una oportunidad para crear uno de los mayores bancos de Europa. Sin embargo, según advirtió, el acuerdo, todo en canje de acciones de BBVA, era el mejor que podía hacer.
Sabadell, propietario del banco británico TSB, rechazó la oferta al día siguiente y, por si fuera poco, publicó el contenido del e-mail el miércoles. A continuación, Torres, rechazando los convencionalismos de la España empresarial, presentó una opa hostil, planteando la misma oferta directamente a los accionistas de Sabadell.
De este modo, el afable exconsultor de McKinsey, de 58 años, ha sorprendido a todo el país y a Europa, donde las opas hostiles son poco frecuentes, especialmente en un sector tan sensible de la economía como el bancario.
El Ejecutivo español no tardó en mostrar su oposición a la operación, alegando que la fusión del tercer y cuarto banco españoles tendría “efectos posiblemente perjudiciales” para el empleo, los consumidores y la estabilidad financiera.
Lorenzo Bernaldo de Quirós, presidente de la consultora Freemarket, opinó sobre la opa hostil de Torres asegurando que “no sabe cómo escapar tras el ridículo por la filtración de su correo electrónico. Estaba acorralado”. Un exdirectivo del BBVA lo explicó así: “Se ha tirado a la piscina a ver cuánta agua hay dentro”.
Presión
Seis años después de convertirse en presidente de BBVA –y 16 años después de entrar en el banco–, Torres no estaba presionado para llegar a un acuerdo. Se puso en contacto con Oliu a mediados de abril, pero una filtración a la prensa la semana pasada le llevó a adelantar la propuesta formal, ofreciendo una prima del 30% por las acciones del Sabadell.
En declaraciones a Financial Times, Torres explicó que, tras el rechazo inicial, “podríamos habernos retirado y eso habría sido, seguramente, lo más cómodo”. Pero añadió que “no me pagan por tomar el camino cómodo”.
Insistiendo en que la oferta fue una “decisión unánime del consejo”, Torres aseguró que la compra de Sabadell generaría mayores beneficios que otra recompra de acciones. También puntualizó que “no hay margen para mejorar la oferta”.
Hijo de padres gallegos, Torres tuvo una infancia nómada, ya que su madre trabajaba como maestra de escuela y la familia se trasladaba con
Torres vivió en Endesa las turbulencias de ser objetivo de una opa
Ha convertido a BBVA en un banco fuerte a pesar de su peculiar estilo de gestión
los cambios de sede de su padre, que ejercía como inspector de Hacienda, agente de Bolsa y notario. Se trasladó a Boston para estudiar ingeniería eléctrica y después empresariales en el MIT, antes de trabajar en McKinsey durante más de una década.
Después se incorporó a Endesa, donde vivió las turbulencias de ser objetivo de una opa, y acabó abandonando la empresa tras ser absorbida por la italiana Enel en 2007.
Torres ha convertido a BBVA en un banco fuerte a pesar de su peculiar estilo de gestión. Desde que vendió su división en EEUU por casi 10.000 millones en 2021, el banco sólo ha desarrollado mercado en su país de origen. España concentró un 25% del beneficio del año pasado, aunque se ve eclipsada por los mercados emergentes en los que está presente. Casi la mitad de los ingresos de BBVA procedieron de México, donde posee el mayor banco del país, Bancomer. El 10% se generó en Turquía, donde es propietario el banco Garanti.
En su opinión, la operación “sería una forma de reequilibrar la balanza, además de tener una lógica en términos netamente españoles”.
Mantener la calma
El banquero afirmó en una entrevista hace unos meses que uno de sus atributos era la capacidad de mantener la calma incluso cuando otros perdían los nervios. Explicó que aconsejaba a la gente que pusiera las cosas en perspectiva preguntándose: ¿qué es lo peor que puede pasar?
Esta semana, Torres afirmó que “incluso lo peor que puede pasar es algo con lo que siempre se puede vivir”. A la pregunta de si le preocupaba que su puesto de trabajo peligrara, respondió: “En absoluto”. “No hay que lamentar haberlo intentado aunque fracase. No hay nada malo en presentar una oferta a los accionistas. Si el daño a mi reputación es por hacer lo correcto, lo aceptaré sin problemas”.